lunes, 29 de julio de 2019

¡Lunes!

¡Por fin comenzamos nueva semana, majos!

Estoy nerviosa porque tengo un montón de planes, quiero ver a mis amigas ya, a todas. De muchas despedirme hasta Septiembre. De otras, volver a reencontrarnos como hoy, el caso de mi amiga Laura que hace muchísimos meses que no la veo. Y tengo ganas de seguir celebrando mi cumpleaños con todas ellas, que por cierto es el sábado. Veintisiete años ya. 

Estoy nerviosa, no es que me haga especialmente ilusión cumplir años, pero, este verano y este cumple van a ser especiales y distintos. Estoy saliendo del peor momento de mi vida, me estoy reconstruyendo yo como persona, estoy en un proceso de mejora y solo de mejora, diciendo adiós a personas tóxicas que me quieren a medias. Yo soy de blancos o de negros, no hay más, o me quieres, o adiós...apártate. Que sigo mi camino.

Quiero agradecer personalmente a Silvia, una compi del trabajo que desde el primer momento supimos que había una conexión preciosa, por unos días maravillosos en la playa. Por ayudarme en el peor momento, por sacarme de casa, por darme vueltas por El Corte Inglés para relajarme, por haberme aconsejado la aplicación para conocer a gente en la que estoy, que no es Tinder. Por hacer mi vida mucho más fácil, más bonita y más feliz. Te quiero, cari. Por estar ahí siempre que te necesito, por enseñarme sitios preciosos como las piscinas a las que fuimos.




Tengo tanto que agradecerte... Te quiero en mi vida para siempre, para hacer muchos más viajes para crear recuerdos, escribir nuestra historia, estar a tu lado si me necesitas y sino, también. Gracias, gracias y gracias por enseñarme que en los malos momentos, la vida también puede ser de color rosa, sentadas frente al mar, bebiendo una copa de vino... Te adoro. 




domingo, 28 de julio de 2019

"Te echo de menos"

Voy a escribirte una de las mil cartas que mi boli ha decidido iniciar, para ello, cierra los ojos Campanilla, y volemos a Nunca Jamás... Escucha a Beret.


"Te prometí hacer todo por ti

Pero hacerte feliz yo no puedo
Y si vas a ser alguien sin mí
Por favor, nunca seas aquello que te hicieron".

Haré cualquier cosa por ti, pero está claro que por alguna razón hacerte feliz yo no puedo. Llevas demasiados miedos en los bolsillos, llevas muchas malas experiencias que han marcado como balas de guerra. Asesinaron tu inocencia entre muchos, no te dejaron volar y cortaron tus alas para rematar tu magia.

"Yo que siempre te esperé

Lo malo es que tú eres fuego
Y yo tengo miedo a arder"

Llevo una vida esperándote, y si tuviera más, las pasaría esperando a ser la causa de tu sonrisa y de tu felicidad. La sonrisa más bonita de este mundo. Pero eres un huracán, un caos que arrasa, quema... Y tengo miedo, a arder de nuevo.

"Quiérete... Hasta que olvides por qué no lo hacías.

Olvida todo menos la alegría
Un sin sentido que te diga "vive" y me llames "mi vida"
Dices "ven", 
Y no me indicas que por dónde siga
Perdiste el tiempo según tú lo miras
Pero lo bueno nunca va a llegar en seguida"

Me llamas, me quieres, quieres que esté a tu lado. Que apueste por el equipo del fuego, me pides hasta que me queme por ti. Y no te das cuenta que lo llevo haciendo siete años...

"Ya llevo una vida queriéndote, dando, esperándote
Dándome igual que haga daño
Que me está costando el poder darme cuenta
Que para ti no cuento tanto"

Peter Pan



¡Nueva novela!

Tengo una noticia que daros. 

Estoy un poco desaparecida del blog porque estamos en vacaciones, y dije que éste sería mi verano y lo está siendo. Viviendo al día, ¡y qué días! Por cierto antes de contaros la noticia. Chicas del Facebook, no habrá más entradas del motero, ha pasado a mejor vida por voluntad propia, así que, él sabrá.

Sigamos. Tengo a mi bollo que tras haberle puesto al día, me ha dicho, "¡Dios, Patri, escribe una novela! Tú vida es para llevarla al cine". Y la verdad, es que muy a mi pesar, así es. Así que... le haré caso. He hablado con Peter Pan, y estamos de acuerdo. Escribiremos esa novela que ya está en marcha y muy pronto os daré más detalles. Os va a encantar. Vamos a por la tercera novela, y eso me hace muy muy feliz. Basada en mi historia. Recogerá todos los textos de este blog desde diciembre, desde que me dejaron... hasta la actualidad, en la que estoy inmersa en las aplicaciones de soltera para encontrar pareja. Esas que dije que jamás me haría. Pero que por lo menos me ayudan a desconectar de esta vida de película que llevo.

Es decir, habrá motero para sus fans, habrá bollo para rato, habrá valenciano, historiadores y guardias civiles... Ya sabéis mi historia, pero novelada mola más seguro. Así que muchas gracias por estar ahí porque la verdad es que estáis a tope con las visitas y eso me hace inmensamente feliz, de verdad, así que gracias, gracias y mil gracias.

Patricia Izquierdo Díaz






sábado, 27 de julio de 2019

"El Guardia Civil"

Queridos lectores les tengo que hablar de alguien nuevo: El Guardia Civil.

Le he conocido por una aplicación de esas de conocer a gente que me recomendó mi amiga Silvia. Ya os contaré, porque vaya fauna que hay, casi igual que en el día a día.

Y es el chico que siempre he querido encontrar. Con carrera, con trabajo estable, con piso, simpático, guapo, sincero, detallista, bromista. Me lo paso genial con él. El primer día que nos conocimos... Bueno, fue el jueves pasado. Venía de estar con otro chico que también había conocido por esta misma aplicación, el cuál, sí para un polvo, pero bueno, aceptable, fin. Así que con todo mi arte, quedé con este hombre, con el Guardia Civil. Y me encantó, éste sí. Tiene el mismo humor que yo, me pregunta muchísimas cosas y se interesa por mí, me da su opinión y si le contesto borde no me tiene miedo, me reta y eso me vuelve loca.

Es un chico que está centrado, claro que son 32 tacos los que tiene el amigo. Y os aseguro que es todo lo que yo quiero, así que estoy cuanto menos ilusionada. La tarde se nos hizo muy muy corta, demasiado corta, pero él tenía que ir a jugar al fútbol y yo al cine a ver "El rey león" con mi amiga Belén.

Estaba tan contenta... Que se lo conté a todo el mundo. Chicas, lo he encontrado. Y encima guapo, metro ochenta y enorme, viajero, aventurero y con ganas de una relación de verdad y familia. Dios mío, lo he encontrado.

Al día siguiente se lo dije. Eres perfecto. Así que, quiero quedar contigo. Tengo mi nueva casa y hay que estrenarla, así que... ¿Cenamos? Casa y cena. Es la primera vez que planeo una cita de verdad, romántica, puse hasta la piscina en marcha para los dos.

Llegó muy pronto, demasiado pronto para cenar así que estuvimos paseando por Leganés, le enseñé donde vivo, mi antigua casa, dónde paseo, con quién salgo, mis planes, no sé, que conociera un poco más de mí. Pero estábamos ansiosos por llegar a casa... ¿Chino? Adoramos la comida china. ¿Os he dicho que es perfecto? Mientras preparaba la mesa y la piscina, estuvimos hablando de Egipto, pero las pirámides pasaron a segundo plano cuando me besó y me subió a la encimera. Empotrador... punto para ti. Pasé a ser simio tan rápido como un ferrari pasa a los 200 km/h. Le pedí que parara, quería una cama, quería quitarle toda la ropa puesto que yo ya la había perdido...

Empotrador. Sí, señoras y señores. Es más, se ha convertido en mi número uno. Hubo un percance, también os lo digo porque esto está empezando a parecer un cuento de hadas, y el percance es que yo tenía la regla, así le aseguré que no llegaríamos hasta el final... Pero, eso solo era mi opinión... porque su respuesta fue... "pues qué pena...". Y así pasó lo que tenía que pasar... Hasta que llamó el señor chino motero. Suele pasar... Como veis, las cosas bonitas solo ocurren en las películas. Nos miramos y dijimos, nos quedamos sin cena, esto tiene que continuar. Y así fue. Nos quedamos sin cena. Hasta que se las apañó para que nos la volvieran a traer.

Lo que sentí cenando con él, fue especial, no había estado tan cómoda con nadie desde hacía mucho tiempo, le dejé besarme, acariciarme, quité todas las barreras y le dejé entrar. Podría dejarle entrar en mi vida para siempre. Hasta que yo la cagué. Le conté mis últimos días con "no amigos", "amigos raros", "historiadores que se quedan ahí clavados", y decidió marcharse porque no creía que yo estuviera preparada para empezar algo nuevo, algo de verdad. Y él pasaba de ser segundo plato y estar metido en juegos de este tipo. Y se fue... No he vuelto a saber nada de él. Le he escrito un parrafón enorme... de hecho, dos. Y no me responde. Es una pena, pero por lo menos me ha hecho pensar que hay chicos que todavía merecen la pena.

En esta historia yo he tenido la culpa de que acabase. Hay cosas que no se deben contar, y depende del momento también es verdad... Pero si habéis leído la anterior entrada, el guardia civil, fue mucho más inteligente que yo y dio en el clavo. Mi ex, sigue ahí, y no estoy preparada para iniciar nada, no quiero hacer daño a nadie. Y este chico lo tenía todo, además de ser buena persona. Y las cosas, antes o después, acaban saliendo. Y le hubiera hecho daño en cuanto hubiera sentimientos hacia mí. 

Me juró que él solo hablaba conmigo, solo quería estar conmigo y que había quitado la aplicación. En mi caso no fue así. El día que le conocí venía de estar con otro. Eso no lo sabe, pero no me deja en buen lugar, y él no se merece esto. Benidorm también ha dado sus frutos... Así que, gracias por hacerme volver a crees que hay chicos maravillosos esperando a ser felices sin hacer daño a los demás.

Has sido la cita más bonita que he tenido. Y con eso me quedo.

Patricia Izquierdo Díaz


Capítulo II

Vienes surcando lo mares en ese precioso barco, como capitán de las tierras valencianas y como capitán de mi corazón, porque esa es al realidad. Vienes directo a Benidorm. 

A tomar una copa de vino y quién sabe qué más. Estoy contenta, mi vida se está solucionando y tengo a todos mis amigos de mi parte. Te tengo a ti también, siempre te he tenido. Atracas el velero con el que tanto he soñado, y me saludas arrastrando tus besos por mi cara y susurrando lo guapa que estoy. Ya soy tuya.

Seguimos con el vino. Mi amiga Silvia está entretenida con el velero, con tus amigos y con su vino. Así que enseñáme que escondes por ahí abajo. Enseñáme los tesoros que tienes y que aún desconozco.

El vino hace que pierda la cabeza, que te diga cosas que no debo decir, pero es que me da igual. Que te quiero, es evidente y que jamás te olvidaré también, y que hoy, has venido a buscarme, es un hecho. 

Analizo el camarote, y veo una cama. Por mi mente empiezan a pasar miles de imágenes. Todo lo que podríamos hacer ahí, y me humedezco. Me tiemblan las piernas, se me pone la piel de gallina tan solo mirando la cama. Creo que es el alcohol. Me he dejado la cabeza en Madrid. No quiero pensar, quiero hacer todo aquello a lo que no me he atrevido antes. Quiero besarte y morderte los labios para que sepas cuánto te he echado de menos. Que he estado con otros, pero que ninguno me ha importado. Y quiero que lo sepas aquí y ahora. Y entonces, dejo la copa en la mesilla, y me lanzo. Te beso agarrándote para que sepas que eres mío y que no podrás irte a ninguna parte. Te muerdo. Quiero que me sientas, que te duela tanto como duele tu ausencia o como duele cada foto que subes con ella.

Abrázame, y deja que pase, deja que te mime, que te bese los párpados, déjame a mí llevar la situación, porque será tan violenta como romántica, tan salvaje como bonita. Quítate esa ropa que me molesta y quítame la mía que sobra. Quítate todo, porque esta noche tiene hora. A las doce tengo que volver a mi hotel, tengo que estar con mi amiga... Y tú has de volver a tu vida.

Me lanzas a la cama de un empujón, devoras cada uno de mis pechos como si estuvieras explorando un cuerpo nuevo, pero sabes que éste solo te pertenece a ti. A mí ya me sobran todos los mimos, todos los mordiscos, me sobra hasta arañarte con mis uñas para que te vayas con la marca de que has estado conmigo. Tengamos pruebas de que esto ha sido verdad y no un sueño como tantas noches.

"Entra" te susurro y te niegas, quieres jugar más, quieres recordar viejos tiempo, pero no tenemos tiempo. Quieres seguir besándome hasta que no quede un trozo de mi piel sin tu olor, sin un beso tuyo grabado. Y entonces... entras. ¡Y qué suerte! El mundo cambia a ser un lugar mejor en el que solo estamos tú y yo. Olvido todo por lo que estoy pasando, olvido a todos los que me han hecho daño éstos últimos días. Olvido la dichosa aplicación que me he hecho para conocer a gente que no te llega ni a la altura del zapato. Olvido que estoy buscando un parche para ti. Y sólo me centro en que te tengo dentro de mí, besándome, acariciándome y eso ya es suficiente. Me llevas al séptimo cielo y yo rezo para que esto no acabe, para que no salgas de dentro de mi, para que las piezas de este puzzle jamás se pierdan. Somos perfectos así.

Te quiero como jamás he querido a nadie. Y cada vez que te beso, sé porque nunca saldrá bien con ninguno... Y también sé porque tú no terminas de ser feliz con ella. 

¿Y ahora qué? ¿Le echamos la culpa al alcohol? O... Quizás prefieras ser valiente e intentarlo de nuevo. Eso mismo me pregunto yo ahora. ¿Quiero ser valiente? Lo único que sé, es que te quiero. Lo digo abiertamente, estoy enamorada de ti. Y lo único que voy a hacer si no estoy contigo es perder el tiempo... Y hacérselo perder a otros... Y los demás no se lo merecen. No voy a hacer daño a nadie.

Creo, Peter Pan, que Campanilla vuelve a apostar por ti. Mi corazón ha hablado alto y claro, sólo necesitaba el efecto del vino para sacar eso que tanto he ocultado... Y que, ha vuelto a salir.

Patricia Izquierdo Díaz




sábado, 20 de julio de 2019

Capítulo I

Buenas noches a todos, queridos lectores.

Primero disculparme por estar tan desaparecida. Mi vida ha dado un giro de 180 grados. Vivo en un lugar diferente, con mis chicas de siempre, con gente nueva también.

He pasado un mes complicado pero he salido del hoyo. Me ha costado mucho pero ya vuelvo a ver la luz en todo. Me he hecho una red social para conocer gente. Y he tenido bastante éxito. He quedado con un par de chicos que me han subido la autoestima bastante, que era justo lo que necesitaba. Tengo un harén que me da los "buenos días" cada mañana, y esto me sirve para estar entretenida.

Pero os quiero hablar de alguien en especial un Funcionario como pone en su perfil, que desde que vi su foto me tiene loca. Hoy he quedado con él, en mi nueva casa. Chino, velas, piscina, música... Ya sabéis el final. Vuelvo a recuperar la ilusión en los hombres. Como veis, he estado muy ocupada también, y me temo que en las siguientes semanas será así, creo que he encontrado a alguien que merece la pena, por lo menos conocer. No lo sé. El tiempo lo dirá. Sus 32 años hablan por sí solo. Yo como siempre, iré con pies de plomo, esta vez sin armadura porque antes de conocerle me la ha quitado. 

Os hablo de ellos, porque para mí es un paso. En mi nueva vida, con gente nueva, con mis amigas de siempre. Y por fin siendo yo. Os iré contando, seguramente muy poco a poco. Este nuevo libro, quiero escribirlo para mí, esta vez quiero guardarme a este nuevo motero con tricornio para mí. Dejemos que el tiempo coja el bolígrafo y escriba este primer capítulo. 

Gracias por estar ahí siempre. Gracias por ir subiendo los seguidores de esa manera tan increíble. Mil gracias por estar siempre ahí leyéndome. Es increíble, de verdad, me dais mucha fuerza para seguir escribiendo.

P.D. Sé de uno que cuando venga de Egipto, va a flipar en colores.

Patricia Izquierdo Díaz


viernes, 12 de julio de 2019

Amor

Amor es besarle despacito los párpados porque sabes que todavía le duele el pasado en ellos.


Por momentos

Me gusta cuando tu mirada me dice que quiere volver a brillar, pero que no se lo diga a nadie, que su escudo funciona por momentos.


Con una sonrisa

La chica que es capaz de contarte la historia más triste que le ha sucedido con una sonrisa de oreja a oreja.


El texto más sincero

Otra noche. Otra más. En la que he visto como las ruinas, se terminan cayendo. Como no ves camino entre tanto escombro. Voy a escribiros el texto más sincero. Esta noche, el gran ogro ha abierto los ojos. Ha intentado escapar de la manera más cobarde de todo lo que ha creado. Pero lo he impedido. Las consecuencias de tus actos has de aceptarlas. Es lo que nos ayuda a aprender. Pero aún así, no era consciente del mal que ejerce a los que estamos a su alrededor. Se lo ha tomado como un ataque personal.

El motero me ha llamado "gilipollas", y no le falta razón, pero no puedo dejar a una persona así sola. Por mi culpa no la va a pasar nada, no quiero culpas. No podría vivir con ello. Me he roto por dentro. Hacía meses que no lloraba así. Las lágrimas se me habían secado hace días. Me duele la cabeza, la tripa, la espalda, los brazos, el pecho, me duele gran parte del alma, porque en el fondo no he sabido llevar esta situación. Y me refiero al principio de los tiempos. Ni siquiera ahora mismo sé gestionarla. Estoy rota ante mi fracaso en esta historia. 

Hoy, haciendo limpieza. He encontrado mi primer diario. Data del año 1999. La primera hoja es de la Navidad de 1999 en la que me lo regalaron. Ya desde entonces me gustaba escribir. Me regalaron el diario y una máquina de escribir. Quería hacer cuentos e historias. Vocaciones muy tempranas, como veis. Tenía un candado puesto, pero he conseguido abrirlo con una horquilla (el por qué sé abrirlo, lo omito). No recordaba nada de aquellos escritos, en los que el ogro ya aparecía en ellos. No recordaba todos los sentimientos que allí plasmaba, increíblemente parecidos a los que ahora siento. Pensé que lo de escribir como sentía venía desde mi primera visita al psicólogo, pero antes, ya lo hacía. Recordar esos momentos, me ha hecho sentirme una niña de nuevo, volver a tener esos "flash" o recuerdos, volver a sentir la piel de gallina por el miedo, volver a estar en silencio por ser una molestia. Por molestar en mi propia casa. 

Hoy he fingido que estaba bien. Pero la verdad es que siempre se puede estar peor de lo que se está. Porque la sorpresa de al medio día, no la estaba esperando yo. Tenía bastante con lo que tenía. Pero no. No soy creyente, pero todos estos sucesos tan seguidos en mi vida tiene que ser por alguna razón. Me gusta llamarlo "karma" aunque no crea en él. Ni en mil vidas que haya tenido yo, he podido llegar a ser tan mala y acumular tanta maldad para que me sea devuelta de esta manera. 

Tengo un debate interior muy grande. No es de ahora. Es de siempre. Lo he visto también en mi antiguo diario. ¿Soy mala persona? Toda la vida he escuchado que lo soy, que soy un fraude, una egoísta, una prepotente, la peor creación de dios, tonta, etc... Sin meternos con mi físico, que ese es otro tema. Eso, lo he escuchado día a día. Todos eran mejor que yo. Todos. Y así me he sentido y me siento cada vez que ocurre algo.

No hace mucho tiempo. A raíz de que me dejaron por otra para ver catedrales. No hace mucho tiempo realmente. Donde mi mundo se vino abajo, descubrí, que aparte de mi bollo. Mis compañera de universidad, eran mis amigas, y me apoyé en ellas. Mi Clara, aún estando en Lugo, estaba conmigo y sus conversaciones me evadían de mis problemas. Dejé entrar a gente nueva en mi vida, con el título de "amigo", Rocío, Silvia, Gema, Sonia, Noelia, etc... La lista es tan larga. Y hoy, aparte de mi bollo, que ese está ahí desde la época de los dinosaurios, me siento muy arropada, consentida a veces, defendida, y querida, muy muy querida... y no con palabras, que también, ¡hechos! Una prueba de ello, ha sido Patri hoy o ayer, ya no me acuerdo, cuando dije, cancelo el cumpleaños. Ella se ha sacado de la manga descuentos para todo para la Warner. Ella ya lo organiza, porque yo no me quedo sin cumple. Ayer, el cine, porque yo no me quedo sin ver Marvel. Si pienso en esto... tan mala no puedo ser. Si ellas dan todo por mí, yo lo hago por ellas siempre. Se me cae la baba con mis amigas. Y agradecérselo es tan insignificante. Ellas saben que pueden contar conmigo siempre, siempre, yo no soy de las que se van. Me la puedes liar bien, que yo aquí sigo... Porque todos cometemos errores. Pero tenemos algo que nos une, una fuerza especial, una llamada amor, del "a pesar de..." del que siempre os hablo.

Hoy estoy rota. Me siento la persona más fracasada del mundo. Siento que no hago nada bien y que quizás el ogro tenga razón en muchas cosas. Me he desahogado con el motero. Llevo todo el día contándole mis penas. Va a acabar harto de mí y con la cabeza como un bombo. Es normal que prefiera a otras para ir al cine, no soy la mejor compañía. Y quiero agradecérselo desde aquí porque si se lo digo a él personalmente siempre me dice alguna tontería. 

El hielo sigue enfriando mis ideas. Sigue reorganizando esta cabecita que quiere huir y esconderse debajo de una mesa. El motero se piensa que es el único que piensa en su ex cada día. No tiene ni idea de lo que es saber a ciencia cierta que la única persona que me puede salvar de todo esto es el señor del velero. Y que por supuesto, la cabeza se va a dar una vuelta a Valencia. Y mi corazón pregunta, "¿no habremos confundido?". A todos nos llama el pasado, pero yo estoy en modo avión intentando arreglar mi presente. Esa es la diferencia. 

Tengo un labio partido. Os dije que iba a ser un texto muy sincero. Seguramente necesitaría un médico pero para ello tendría que dar muchas explicaciones. ¡Qué falta me haces, bollo! Te llamaría ahora mismo, para que me curaras el labio. Esas cosas solo te las puedo pedir a ti. Te tendría aquí luchado con los pañuelos de papel porque se te quedan pegados en la herida y pidiendo más gasas porque ya se están acabando. Son muchas las batallas que llevamos ya. Hoy me estoy curando sola frente al espejo. Pero la sangre no cesa, creo que es hora de avisar a tu amigo. Te echo mucho de menos. De hecho, voy a llamarte a ver qué tal te va. Y fingiré que tengo una vida maravillosa, tanto que no te lo vas ni a creer. 

Tengo muchos miedos. Miedo a quedarme sola por ser tan mala, a que a alguien le repugne mi cuerpo después de un polvo, por eso suelo vestirme en cuanto termino, porque a la primera que se la pasa eso por la cabeza es a mí. Tengo miedo a que me dejen de nuevo, a querer y no ser correspondida, a darlo todo y que nunca sea suficiente. Tengo miedo a tener miedo, a ese que te paraliza y no te permite ni chillar, ese que hace que te hagas pis, vomites o te dé una taquicardia que sientes como te mueres poco a poco. Tengo mucho miedo al ogro y a lo que puede ser de mí. A perder a mis amigos. Tengo miedo a perderme yo, a dejar de ser quién soy por estos motivos. ¿Diva? Eso es solo mi fachada. Me la he currado bastante para que nadie pueda ver toda la mierda que hay detrás de unas pestañas y unos labios rojos. Nadie se merece esto, ni vivir esto de cerca. ¿Cómo voy a querer tener pareja? ¿Cómo voy a querer desear a alguien que se enamore de una persona con tantos miedos, con tantas corazas, con tantos problemas, con tantas lágrimas secas, con un ogro en casa...? ¿Cómo? Yo no podría desearle eso a nadie. 

No he tirado la toalla porque tengo la esperanza de que mi vida está por empezar. De que todo esto acabará y podré ser feliz, seguramente en una casita en el campo con perros y dos niños. Pero hay días, en los que la vía rápida y fácil está ahí... Y te llama, como una tentación. Pero no sé cómo lo hago, y saco fuerzas por luchar por mí, por mi familia y por personas que no se lo merecen, porque yo soy así. No soy gilipollas o igual sí, pero... Es mi forma de ser... Y me sale solo, ayudar, me sale. Pensar en los demás también. No puedo evitarlo. 

Ahora quiero dormir. Pero las pesadillas vendrán a recordarme mi maravilloso día, o partes de algún capítulo de mi pasado. Mañana, Silvia, me ha preparado un día genial. Tengo que estar bien. Tengo que dejarme querer, que también es de valientes y dejar que me ayuden. Clara, gracias por el consejo. Y bollo... vuelve ya.

Patricia Izquierdo Díaz


jueves, 11 de julio de 2019

Veintitantos

La chica de los veintitantos, que es un huracán de realidad y una bocanada de sentimientos desperdigados.


Detalles

“Es muy grato cuando alguien conoce pequeños detalles de ti. No porque tú se lo estés recordando constantemente sino porque ponen atención”.


Eso es vida

“Besar lento, hacer el amor duro, hablar claro, fallar poco, bailar mucho, comer rico, amar fuerte y reír de verdad”.



Lo que encuentras

"Quien no sabe lo que busca no entiende lo que encuentra."

Claude Bernard




Lo que necesitas

"Cuando algo te hace muy feliz y a la vez te da un poco de miedo, es que es exactamente lo que necesitas"

Anónimo


Su castillo

Y entonces la princesa luchó contra el dragón y se construyó su castillo ella sola.

Fin


Su dureza

Ella tiene caparazón sin ser tortuga. Él, unas manos que acarician su dureza. Y algunas veces ella saca la cabeza de dentro y sonríe.


Hora de huir

Creo que te pareces bastante a lo que me gustaría que apareciera. Va siendo hora de huir.


Gilipolleces

Una mujer que te quiere estará dispuesta a soportar todo lo que hagas y te querrá siempre.
Esa mujer es tu madre, porque yo no voy a soporto gilipolleces de nadie.


El cansancio

A veces el cansancio no entra por el cuerpo, sino por el corazón.


Antes de ti

Antes de ti, estoy yo.

Porque te quiero, pero yo me quiero más.


Valor

Se necesita valor para alejarse de las personas tóxicas aún cuando son importantes para ti.


Fan

Soy fan de las personas que rompen corazas y no corazones.


No funcionó

Ellos se querían, pero no funcionó.
Él por cobarde y ella por sentir más.


Estado

Con el corazón cerrado y la sonrisa de par en par.


Enséñame

Enséñame a quedarme, que irme ya me enseñaron todos.


Cosas que no hacer

No te hagas pirómana por el fuego equivocado.
Hay quienes ni siquiera valen la quemadura.


Sentir

Sentir sin tocar es un deporte de riesgo, tocar sin sentir, tan solo un juego.


Lo que mereces

Lo que mereces ( y ya sabes...no aceptes menos).
Lo que mereces es un SÍ rotundo. Un SÍ donde no haya lugar a los no sé, a los ahora no, a los "eres tú pero no es el momento", a los "es que no estoy preparado".
Un SÍ. Claro. Igual que el que das tú. 
Un SÍ con miedo porque todos los principios lo dan.
Pero un SÍ que sea más fuerte que cualquier miedo. 
Un SÍ a tu yo completo, a tiempo completo y no un querer a medias cargado de esperas que duelen.
Alguien que te diga SÍ. Que te coja la mano y se atreva a caminar contigo. Ayudándote a crecer. Alguien que camine contigo. No delante de ti.
Eso , y no menos, es lo que mereces.
No aceptes , no cedas. Respetate lo suficiente para entender que si te van a querer a medias es mejor que no te quieran, que para eso, ya estás TÚ.


Spiderman

Ayer tuve una prueba más de lo que me quieren mis amigos. Ayer decidieron que no me quedaba en casa y que tenía que salir a un plan guay, a un plan que me despejara la mente de todo lo que la enturbia. Y acabé en el cine. Viendo Spiderman. ¡Me encanta Marvel! Tuve un caballo llamado así. Me gusta lo mágico. Y la amistad, la de mis amigos es pura magia.

Tengo tantas ganas de abrazarte Clara, tantas... Y Cris, que al fin y al cabo, estás, tarde, pero estás. Y mi mejor amigo, está aunque no esté ni en el mismo continente. Soy muy muy afortunada. Quería daros de nuevo las gracias por tanto amor del bueno.

Pero he estado pensando mientras le doy a la tecla. Esta semana ha sido un desastre, y las siguientes también lo serán. Pero es mi problema y no puedo dejar que les afecte. Aunque sé que será inútil y más para uno de ellos. No busco que me salven como me dijo ayer Cristina. Ya tuve un príncipe azul y no funcionó. Mi vida es mía y mis problemas... también. Aunque como siempre digo, parece que los problemas cuando se llevan entre dos, es mejor.

Gracias a todos los que habéis preguntado, a los que estáis pendientes y a los que no erais conscientes de la gravedad de la situación. Gracias a todos los que hacéis que mi vida sea un poco más bonita. 

Patricia Izquierdo Díaz


Te encontrará

Sí, otra vez, otra prueba de fuego. Pero la superararás. Pondrás todo de ti. Pasarás cada parte del proceso aunque duela y llores... y no tropezarás con Tinder ni gilipolleces. Esta vez no hay marcha atrás. Quien venga, deberá estar a tu altura. 

Spoiler: te encontrará.


miércoles, 10 de julio de 2019

Epílogo

El primer beso, una despedida agridulce, aquel nuevo hogar, un reencuentro inesperado... La vida está llena de emociones y todas ellas guardan el recuerdo de una calle. Calles de nuestra ciudad. Esas por las que no te cansas de pasar o por las que pasas al cabo de varios años y despiertan en ti numerosos sentimientos.
A veces no es suficiente con mudarse de ciudad. Uno siempre vuelve a su origen y es inevitable sentir. Y si no vuelves... si no vuelves construyes recuerdos en otro lugar.
Esas noches en las que te acuestas eufórico pensando en esa chica, su sonrisa y el olor de su habitación en la calle Placer.
Aquella mañana que la resaca no le curaba ni el mejor remedio de la botica de la abuela y las tardes de manta y sofá sin ganas de nada con tu ex bombardeando tu móvil.
Perderse caminando entre la gente o buscar la tranquilidad en la calle menos transitada.
Seguramente tú has vivido miles de historias similares a estas y lo más irónico es que tal vez algunas se entrelazan.
Que en ese lugar donde tú sentías que tocabas el cielo, tal vez alguien vivía su propio infierno y esa chica con la que te metiste luego te dio calabazas. Bien lo explica José al inicio de este libro, que cada persona tiene su propia historia y cada calle forma parte de esta.
Yo me quedo con la calle Urzaiz a las 3 a. m. de un jueves cualquiera, ¿y tú?
Fanny Figueiras