sábado, 31 de agosto de 2019

Belén ha vuelto

¡Qué gusto da veros de nuevo juntas! De momento en el blog intercambiando textos. Sé que hacéis el equipo perfecto. Belén, no dejes de escribir, pinta, baila, llora, ríe, canta y déjalo escrito en el tiempo. Me alegro de que hayas pasado un gran verano. Un saludo de tu No Amigo.

P.D. Espero leerte más.

Peter Pan


31 de agosto

31 de agosto. El ultimo día de mi mes. De mis vacaciones. De mi verano. 

He estado mucho tiempo desaparecida, pero no veo conveniente pedir perdón por ello, lo hice porque lo necesitaba. He hecho el menos caso posible al móvil, los dramas de la gente no me interesaban, mi verano se ha basado en sonrisas, en estar con mi gente, en recuperar la Belén enérgica, en beberme los libros que no pude leer en invierno y beberme las cervezas heladas que me ponían en la mano, en ver series cual friki, en ser Úrsula en el agua porque la sirenita se quedó en el pasado, en saltar con la charanga, en bailar con la orquesta, en disfrutar conduciendo, en hacer la maleta, en conocer cosas nuevas, en conocerme a mí, en disfrutar, en desconectar y en no estar en casa. 

La vuelta me va costar. De hecho pienso en el lunes… y me apetece achuchar a mis niños, comérmelos a besos y ver lo grandes que están. Pero cuando me acuerdo de que el lunes todo van a ser lloros... creo que la primera que va llorar soy yo. 

La verdad es que me han pasado muchas cosas, que no sabría por dónde empezar a contaros, pero supongo que tengo todo un año para escribirlo todo. ¡Ya estoy pensando en el verano que viene! Asique hoy, voy hablar de mí. Del resto, os lo cuento otro día. 

Que ha supuesto para mi este mes de agosto? He vivido muchas experiencias, que quizás a primera vista son insignificantes, pero lo cierto es, que a mí me han valido. Tengo que decir, que mi verano no solo es agosto. El mes de julio, aunque trabaje, me propuse no parar y los fines de semana estuvieron llenos de planes y las tardes, tampoco se dieron mal. Pero si de algo me he dado cuenta estos días de verano es que soy más gitana de lo que yo creía. No me malinterpretéis. Pero es que los lunares, las rumbas, los abanicos, los farolillos y el sur, lo llevo en las venas. Yo, Belén Triguero, más de Cuenca que las Casas colgadas, he encontrado otro lugar en el mundo. 

Mi instancia en Málaga, creo que ha sido lo mejor de mi verano. Estaba en mi salsa. Las caderas se me movían solas con la música, el abanico azotaba el aire sin querer, y aunque el cartojal no es la mejor bebida del mundo, los lunares se me han tatuado en el alma. Además, ¡que gente tan guapa! Siempre he soñado con ponerme uno de esos vestidos para bailarlo mientras suenan los rebujitos, niña pastori o cualquier sevillana. Pero es que ahora sé a ciencia cierta que un día lo cumpliré. 

Tengo que decir que la compañía allí me hizo los días pasaran volando. Mis amigas lo han dado todo aun siendo menos flamencas que yo. Pero la luz de mis días, como dicen allí, fue mi gitano. Tan morenito, descamisao, cantando lo que le gusta, con el sombrero y la botella de cartojal en la mano. Creo que entre lunares, me he vuelto a enamorar.  Somos más iguales de lo que queremos reconocer y sinceramente, creo que Málaga, nos ha unido un poco más. Hemos compartido muchos momentos allí, desde intentar bailar una sevillana, y mira que el pobre es arrítmico y baila fatal. Hasta bañarnos en ropa interior con nuestros amigos en la playa. Y es que.. hay veces que para encontrar el norte, hay que ir hacia el sur. Y nosotros, creo, que nos hemos encontrado. O es que entre las arañas que me picaron, se encontraba el bicho del amor. No lo sé, la verdad es que las arañas se podrían haber ahorrado dejarme marcada 30 veces por todo mi cuerpo, total al gitano le tengo más visto que él te-veo y no era necesario el bicho del amor ni tener que medicarme para estar en los mundos de yupi. Aun así, ¡Quiero vivir allí ! 

Podría hablar y hablar de mi experiencia en la feria de Málaga... pero mi verano no solo ha sido allí. De todas formas, os lo cuento en otro momento. Es mi último sábado del verano y mi última maleta por hacer. Esta noche es mi última fiesta de este mes y pienso darlo todo. Ya os contare. ¡La verbena me espera!

Belén Triguero Guijarro


Jefa de planta del Severo Ochoa

Hoy me encargaré yo del blog porque Patri ha tenido un percance. Me encantaría subir una foto de ella ahora mismo. Está maravillosa con la nariz escayolada y un ojo amoratado. Es la belleza personificada. Lo vamos a tomar a cachondeo porque el día 3 de septiembre está muy cerca. Así que voy a empezar a contestar mensajes en Facebook de todos vosotros. No estoy con ella, pero mi comunicación es continua. Supongo que ella ya os contará las razones de su nueva imagen. Te van a hacer jefa de planta en el Severo Ochoa... Ya te vale. 

Bueno, pues sin más dilación, empezamos a contestar a todo. Estamos pidiendo más colaboraciones para el blog porque queremos más puntos de vista sobre los diferentes temas. No solo la vida de Patri, con ella tenemos para escribir una novela, que es lo que está haciendo, aunque no sé si verá mucho con ese ojo. ¡Vaya tela! Y el lunes empiezas a trabajar. Tú sí que sabes impresionar a la gente.

Gracias siempre por estar ahí.

Peter Pan


Corre peligro el 112

Lo primero que quiero agradecer hoy, es a Johnny y su infinita charla hasta las dos de la mañana amueblándome la cabeza. Es curioso como has pillado mi personalidad, y además como sabes que voy a hacer antes de que lo haga yo o como voy a actuar ante las diferentes situaciones. Es alucinante porque nos hemos visto un día. Y es asombroso, la verdad es que me encantan esas charlas, donde tú mantienes tu paciencia a tope y aguantas mis... no sabría cómo llamarlo. Me dijiste que era de extremos, de todo o nada, y así es. Ojalá todo el mundo me conociera tan detalladamente como tú. De todas maneras, gracias, mil gracias... por estar ahí. Y ahora, voy a contar lo que te conté ayer en primicia y quería seguir reflexionando sobre ello... De hecho, he estado pensando toda la noche.

Nachete, os acordáis, ¿no? Bueno, pues la última vez que quedamos, el jueves. De siesta a siesta (qué tendrán las siestas) pues, genial. Como os dije un "number one", la noche fue la que me confundió como a Dinio. La noche en el campo, otro con su furgoneta, las estrellas, las caricias, el ven y apóyate en mi hombro... No somos así. No somos de caricias. Lo nuestro es fácil y sencillo. No somos de velas, no somos de esos actos ni de susurrarnos "te he echado de menos" al estilo Pablo Alborán, lo nuestro, es la relación más fría que existe. Es lo que es. ¡Es mi 112! No somos ni siquiera amigos... Y tantas atenciones, tanta... odio esta palabra, amabilidad, tantos detalles... Aparte de que para mí es incómodo, no cuadraban en lo que somos.

Johnny, me dio la posibilidad de que se hubiera "liado" que para él, hubiera cambiado algo... que se podría haber enamorado ¡vaya! Nacho es tan romántico como una piedra, no expresa ningún tipo de emoción en absoluto. Ni yo tampoco. Es imposible que se enamore de mí. Ahora resulta, que todos van a estar enamorados de mi. ¡Es imposible! Johnny, creo que me ves con muy buenos ojos, pero yo no soy nada especial para que se pillen por mí o incluso, se líen. Cuando me conocen, salen huyendo, y tú lo sabes, porque sabes mi última historia. Y eso, el factor común, soy yo. Así que no creo que nadie se pare a enamorarse de mí mientras coloca velas o me hace mirar a las estrellas. Descarto esa idea.

Lo único que no quiero... Es que esto se complique porque es justo lo que necesito ahora mismo. Cero compromisos. Como te dije, me dan alergia. Aunque ante esta afirmación, Johnny que estuvo mucho más inteligente que yo me dijo: "No te da alergia el compromiso, viene Samu y te le quedas, eso es así. Sólo que estás enamorada de un tonto". Pues... creo que puedes llevar, sólo un poquito de razón. Por eso mismo te decía ayer, no quiero complicaciones, no quiero velas, no quiero caricias, no quiero nada de eso... No. Ahora no. Y no quiero que mi 112 se complique, porque lo voy a utilizar mucho.

Me aconsejaste hablar con él. Pero yo soy de obviar los problemas cuando creo que se pueden complicar, es decir, de huir. Es la vía fácil. Si yo expreso todo esto, quizás le pierda, o quizás no. No lo sé. Y ahora mismo no me puedo permitir eso. Estoy hecha un lío. 

Te invité ayer a escribir en mi blog. Esa invitación aún sigue en pie. Además, escribes correctamente y sabes de lo que hablas. Es una buena manera de empezar... Contestando este texto. Venga, anda, anímate. No va a ser Peter Pan el único que escriba aquí. ¡Necesitamos más chicos! Gracias por la charla de anoche... Señor de Talavera.

Patricia Izquierdo Díaz




😎

"Algunas sueñan con ser hadas.
Otras sueñan con ser princesas.
Yo siempre quise ser bruja"


Se me olvidaba...

¿Veis? Una tiene la cabeza para llevar el sombrero de las fotos.

Seguía hablando... quien dice hablar dice ser un microondas (conversaciones de sexo sin llegar a más), con un militar de mi estilo. ¿Cuál es mi estilo? Ojos claros y rubios... Lo voy a poner en el blog porque volverme a hacer las aplicaciones para denunciar su perfil, me da una pereza absoluta.


Hablamos de Badoo concretamente. Alejandro, ya sabéis mi perdición con los Alejandros, como dice mi amiga Sonia, tú varías poco en el nombre. Chico con tatuajes... En fin, enamoradita me tenía, pero ya os digo, hubiéramos llegado a polvo y poco más, qué pereza de chico, sólo sabía hablar de un tema, y ya os digo cuál era. Rubio... (nada más que decir). Bien, pues ahí estaba, dándome conversación por las noches, por la mañana los "buenos días", qué majo oye... Pero hubo algo que me llamó la atención... Con lo guapo que es... ¿No tenía una foto suya de perfil? Ni tenía Instagram, ni ningún tipo de red social... Raro, ¿no? Bueno, pero pasaba el rato, que era lo que me importaba.

* ¿Recordáis por qué me hice las aplicaciones de conocer a gente? Para llenar los vacíos del motero. O sea que tampoco es que la gente que conociera en ellas... Me importara en principio mucho. (Johnny, eres la excepción, no te me ofendas).

Pues bien, sigamos con la historia. Mis amigas con Badoo también, han encontrado esto...


Y, ¡sorpresa! Tenemos a su gemelo. Igual de guapo por cierto, con los mismo tatuajes que Alejandro, pero éste se llama Álvaro y tiene un año más... ¡Anda! ¿Los gemelos suelen tener la misma edad? Vaya... ¡Cazada! 

Te llames como te llames... Calentar sabemos todos. Y los rubios como tú... Me quedáis muy muy pequeños. Eres un rato agradable, un ratejo, no eres más te llames como te llames... Y si ese de la foto... eres tú. En fin, cielos míos, estas son las aplicaciones en las que no os debéis meter jamás. 

Cuento esto, porque este chico tan mono y precioso, cuando me vine al pueblo, aquí a Extremadura, me dijo que no iba a estar detrás de mí siempre, y... o quedaba con él, o me borraba... ¿Exigencias... a mí? No sabes con quién hablas, buen mozo... Eres otro más al que he cazado... Mira es evidente que el CNI conmigo se ha perdido un tesoro. Pero que me vengas a exigir que esté babeando detrás de ti... Eres un gilipollas, eso es lo que eres.

Sexo, aunque suene de sobrada, me sobra, voy servida, gracias. De amor, el justo, no correspondido, no puede ser perfecto todo. Amig@s... l@s mejores... Y gente a mi lado que está conmigo antes, durante y después de mis viajes al pueblo... a patadas... ¿En serio, pensaste alguna vez que alguien como yo... iba a ir detrás de alguien como tú? ¡Si no voy ni detrás del que me tiene loca! 

Bueno, es algo que quería dejar público por si alguien le ve, le conoce, le han robado la identidad, yo que sé me espero cualquier cosa... Y chicos, todos los habitantes de la Tierra con pene, me dais ya un poco de pereza y de grima... Me quedo con lo conocido y reciclando que conocer a petardos nuevos... ¡Oh, mamma! Que saturada estoy de esta gente y de esas aplicaciones.

Si enseñara todas las conversaciones que tengo en Instagram de... ¿desesperados? No sabría cómo nombrarlos la verdad... Fliparíais... Quizás algún día me anime y cuelgue pantallazos... 

Ahora sí, me voy a disfrutar de una maravillosa noche viendo las estrellas, ya me entendéis... Disfrutad.

Patricia Izquierdo Díaz


Última noche en Extremadura

Buenas noches a todos.

Mañana ya vuelvo a Madrid e intentaré ir contestando a muchos mensajes que me habéis mandado por Facebook e Instagram. Gracias de verdad, pero os habéis multiplicado y no me da la vida. Quiero aclararos algo, no soy experta en nada, me encanta escuchar y las teorías se me dan muy bien, pero llevarlas a cabo, no tanto. Pero gracias por confiar en mí y contarme vuestras experiencias. Por supuesto, el blog está abierto, como siempre digo, a todo el que quiera expresarse. Disculparme. Me da mucha rabia no poder llegar a todo, pero lo voy haciendo poco a poco en mis ratos libres. 

El lunes empiezo a trabajar en un nuevo cole y no os aseguro que sea tan rápidas mis contestaciones, pero las tendréis.

Voy aclarando puntos. Gracias por comentarios como este.


Me vais a sacar los colores entre todos y os aseguro que no soy gran cosa, de verdad, os lo puedo prometer. Pero gracias, y más en estos momentos de mi vida. El autoestima me lo tenéis a tope.

Más cosas... Sandra, Clara, chicas... Me habláis mucho de mis últimas fotografías en Instagram. "¡Qué delgada!", "Estas hiperdelgada, Patri", "Oblígate a comer...". Chicas, no os preocupéis, estoy bien, como siempre. Sabéis como me trata la vida... No hay que decir mucho más. Pero gracias por estar encima y preocuparos tanto de mí. A partir de mañana iros buscando días para los reencuentros, os he echado de menos a todas. Y os tengo mucho que contar.

Mensajes sobre una noche de domingo que Peter Pan comenta en sus escritos (por cierto, Peter Pan está bien, su ausencia se debe a que está cabreado como una mona. Se le pasará). Es algo muy íntimo que no contaré jamás en el blog. Lo siento mucho. De momento solo lo sabe mi amiga Esther, Sonia y Laura... Las demás, por motivos obvios (las vacaciones), estáis a la espera de las novedades.

El repollo. Gracias por vuestro apoyo, pero como profesora os digo que no hay que pegar. Las cosas van mejor, porque no nos hemos visto y espero que así para los restos de los años que me queden de venir a este pueblo (mi lugar en el mundo).

Nachete. ¡Oh, mamma! Qué os puedo contar... Siempre ha sido mi 112 y lo va a seguir siendo hasta que aparezca de nuevo alguien importante, como en su día apareció el chico de Instagram. Hasta entonces, a vivir la vida supongo... día a día.

Y qué más... No recuerdo ahora mismo más temas que me hayáis preguntado. Sobre Belén, que si no escribía. Está ocupada viviendo su verano y supongo que a la vuelta escribirá sobre ello. Lo más seguro y sino ya le pediré que vuelva. ¡Ah! Que si monto a caballo. Sí, desde los seis años. Es algo que me apasiona y disfruto, a pesar de que me da una alergia horrorosa, pero lo seguiré haciendo. Os voy a presentar a Bambi (su nombre real es Banderín 32. Lo sé, muy feo, mola más el mío).


Él es el auténtico amor de mi vida. Soy feliz cuando estamos juntos y es amor recíproco y de verdad. Ojalá se viniera conmigo a Madrid. Estoy estudiando la posibilidad, pero todo se verá el día 3 de septiembre.

¡Ah! Me habéis preguntado por esa fecha. Es que madre mía, cuántas notificaciones en el día de hoy. Tengo un "juicio" no puedo decir más, donde mi vida, espero, que cambio 180 grados, y de momento, lo siento, pero tampoco os puedo contar de este tema.

Y eso ha sido todo por hoy. Voy a continuar la noche con Nachete, así para despedirnos hasta el próximo verano... Siempre nos quedará Madrid... Ahí lo dejo y... Peter Pan, querido... háblame, ¿eh? Actitudes de crío, no. Eso quien te lo consienta... 

Gracias y mil gracias por estar siempre ahí. Mañana más y desde Madrid. Buenas noches, amigos.

Patricia Izquierdo Díaz

Bienvenida Cenicienta

Estoy muy contenta por una nueva aportación que tenemos: Bienvenida Cenicienta. Tengo que decir que detrás de ese nombre, hay una chica maravillosa y que estamos pasando por algo similar, y bueno, que si necesitas algo como te dije anoche, estoy aquí. Que a mí me viene muy bien escribir, pero cada uno somos diferentes, lo mismo te viene mejor llorar, pero hay un momento en que las lágrimas se agotan y la pena no cesa.

Ellos son los que han decidido continuar con sus ilusiones. En mi caso, yo no le volveré a escribir (creo) porque él se merece ser feliz con quien elija, al fin y al cabo es su decisión. También el motero tiene una mente muy compleja donde se hace pajas mentales muy fácilmente. Se ha empeñado en que las segundas oportunidades no son buenas, cuando no hemos tenido ni la primera, como te ha pasado a ti... Y no lo sé. ¿Conformarse con ser amigos? No seríamos amigos... ¿Le vas a contar tus cosas con otros chicos? En mi caso, el motero, sí me las contaba pero porque no era consciente de lo que yo sentía, y me las he comido dobladas, pero... no te lo aconsejo. Se pasa muy mal. Te mueres de celos por dentro, y tu autoestima pierde.

No soy nadie para aconsejar, te cuento mi experiencia, pero soy un puñetero caos ahora mismo. Le quiero tanto como le odio. Saldría corriendo si me necesitara, pero a la vez, estoy muy cabreada con él, porque las cosas no se dicen así, por WhatsApp, ni en un momento que te sale, es muy egoísta por su parte. No ha hecho nada, absolutamente nada bien, ha ido como pollo sin cabeza, y eso lo sufre solo uno, el que está pillado. Así que, querida Cenicienta, solo puedo darte mi apoyo y todo mi ánimo para que superes este bache. Que Septiembre solo puede traer cosas nuevas, y que ojalá los últimos meses del 2019 te traigan el giro que necesitas para ser un poquito más feliz. 

Espero muchos escritos más. Gracias por compartir tu historia.

Patricia Izquierdo Díaz


Perdida a los 25

¿Nunca os ha pasado que os arrepentís mucho de algo y no sabéis cómo solucionarlo?

Mi historia va de eso, siguiendo el consejo de alguien, tengo que escribirlo para desahogarme.

Todo empezó en una época mala para mi, de salud no estaba bien, en el trabajo tampoco, en el amor fatal y bueno, en ese momento no era feliz.

De la nada, apareció un chico que alguna vez le había visto, muy guapo, pero nunca jamás pensé que iba a hablar con él. Estaba poco receptiva a todo y cuando mi actitud es esa, lo siento pero no quiero estar pendiente de nadie y me encierro en mi misma.

Lo cierto es, que sin darme cuenta, este chico poco a poco me fue ganando, hizo que me olvidara de lo mal que lo estaba pasando esos días, simplemente hablando un poco con él por whatsApp. Me decía tantas cosas bonitas, se preocupaba por mi, y yo siendo tan tonta de no darme cuenta de nada. Me daba mucha vergüenza quedar con él y no gustarle, porque creía que nunca me había visto, pero cuando me dijo que sí sabía quién era en persona, me tranquilicé y decidí quedar con él. 

Vino una amiga conmigo el primer día que le vi. Me gustó estar con él pero hubo algo que a mi me hizo echarme hacia atrás y le dije algo que siempre me arrepentiré, que fue: "me recuerdas a mi ex". En ese momento todo se vino abajo, él decidió dejar de hablarme, cosa lógica, y yo me alejé de él.

La historia continúa, pensaba que no me gustaba, pero estaba equivocada, no me podía engañar a mi misma... pero la actitud de él hacia mi había cambiado y mucho, me le encontraba por la calle y ni me miraba, o si le hablaba por whatsApp, ni me respondía. 

Hasta que llegó un punto en que volvimos a hablar y quedamos más veces, pero no fuimos a más por no sé cuál razón, por orgullo o no lo sé. 
Después de esto, mi actitud hacia él cambió radicalmente, y cuando me decidí a decirle todo lo que sentía por él y jugármela, me dice que está conociendo a otra chica. 

En ese momento todo se me vino abajo, estuve, bueno... estoy, mal por pensar que otra chica sí le valora como lo tenía que haber hecho yo antes y no me di cuenta.

Él aún así, seguía preocupándose por mi, me preguntaba cada noche qué tal estaba, porque no quería que lo pasara mal por él. 

Hasta que quedamos por última vez, y digo esto porque los dos sabíamos que iba a ser la última. No paro de pensar en ese día, en él, en el último beso que nos dimos... y cuando cerró la puerta de mi casa, se llevó todas mis ilusiones con él. Lo veía y lo sigo viendo tan imposible volver a como estaba antes conmigo...

No hay día que no piense en él y que me arrepienta de lo que hice y no hice en su momento.

Ahora cada vez que le veo por la calle, las piernas me tiemblan, me pongo nerviosa, porque de verdad siento que lo hice mal y me he perdido conocer a una persona que, conmigo, encajaría perfectamente.

Lo cierto es, que no quiero olvidarle, no quiero perderle, si tengo que ser su "amiga" lo seré. 

Día tras día me arrepiento de no poder estar con él por mi culpa, le veo pasar por la calle hablando por teléfono y desearía ser yo la que habla con él, pero no es así. 

Hasta aquí mi drama amoroso, espero que vaya pasando, pero cómo cuesta cuando los sentimientos son de verdad.

Cenicienta


Después de 10 años

Fue un encuentro después de 10 años, corto pero bonito. Dio para ponernos al día y hasta para tomar un heladito. Espero que no pasen otra vez todos esos años para verte y que podamos hacer mas cosas. Fue un poco sorpresa porque no esperaba verla pero cambie de planes y decidí coger por Madrid para verte. Tenia ganas de volver a encontrarme contigo.

Miguel Becerra Pérez


#30

La ves hermosa, desconfiada y orgullosa, pero no ves que es una jodida superviviente.

David Sant


Hola, de nuevo, 112...

- Ven, déjame que te tape los ojos como en la azotea de Callao.

Sabía que iba a tropezarme por la cuesta que da al chorrito. No se oía nada más que el sonido de los grillos en medio de la noche.

- He reservado el bar de la piscina - me susurró al oído.

- ¿El bar entero? - pregunté girándome hacía su boca.

- No, boba, aprovechemos que hoy es miércoles y ya no queda nadie en el pueblo. Vamos a estar solos... Ven sígueme.

- No me sueltes - le pedí.

- Eso nunca.

Bajamos los escalones que dan al bar y me quitó sus manos de mis ojos.

- ¿Qué te parece? - me preguntó Nacho.

- Que me encantan los chipirones desde hace no mucho - dije viendo las distintas raciones que estaban en la mesa junto con dos copas de vino, tres velas y un mantel de color granate - ¿Qué es esto, Nacho? - le pregunté poniéndome un poco nerviosa.

Nacho y yo para que os situéis, tenemos una relación solamente sexual. Y solo en el pueblo, aún siendo de Madrid. Lo "dejamos" cuando empecé a hablar con el motero, y decidí esperarle y esperarle durante meses. Volvamos a esta historia. La única vez que le salió el lado romántico fue el 4 de enero en una azotea de Callao en Madrid, ese día dije que quería dejar lo que estábamos haciendo. Estaba ilusionada con alguien, y quería empezar con buen pie. Pero esta noche me ha cogido de sorpresa. Y la voy a disfrutar.

Me siento justo al lado de él. La forma de sentarse a cenar es muy importante, y los dos estamos de acuerdo. Aparta el pan que está entre nosotros. Bien, directo. Sí, señor, iniciativa. Pero no me mires tan intensamente, porque los ojos claros me pierden. La boca se me seca, me humedezco los labios. Ya estoy perdida. Patri, siéntate recta, mira hacia otro lado, y bebe, bebe vino. Madre mía. Se me ha hecho un nudo en la garganta, en el estómago y vaya usted a saber en qué sitio más. ¿Me estoy poniendo nerviosa? ¿Con Nacho? No creo. No. Para nada. No. 

- Bueno, ¿y qué tal en el pueblo?  - pregunta mientras come un trozo de pan.

- Bien, todo bien - respondo mientras me toco la oreja. Si yo te contara...

- ¿Y con el chico de Instagram? - la pregunta del millón. Poco ha tardado en salir el gordo.

- Amigos, no llegamos nunca a nada. Y ahora menos - respondo y sigo bebiendo.

- ¿Sólo amigos? Si le trajiste al pueblo creo que me dijeron... - dice mientras me echa más vino en la copa.

- Nacho, ¿te importa si no hablamos de él? Es que últimamente le tengo hasta en la sopa, y no me apetece pensar en él. Vamos a cenar... chipirones, y todo lo demás... ¿vale? - le respondí algo tensa. Esto me está costando la vida. ¿Es una especie de cita esto? No me está gustando un pelo, de hecho, me siento muy incómoda. 

- Nacho - le llamo - ¿A qué se debe todo esto? Nosotros no hacemos... - explico indicando a la cena - toda esta parafarnalia. Nosotros lo hacemos fácil.

- Hace ocho meses que no sé de ti. Me parecía feo entrar a matar. Pero si eso es lo que quieres... - Me agarra la cara y me besa. Me besa como sólo él sabe hacerlo, tan distinto a los demás... Me pasea su lengua por mi labio inferior y luego lo succiona... No dejes de besarme porque ya he perdido el control de todo- ¿Así está mejor?

- ¿Vamos al postre directamente? - pregunto algo acalorada.

- Come. Necesitarás fuerzas...

La noche ha pasado entre risas y recuerdos muy rápido. Ahora llega el momento del "¿qué hacemos ahora?" Es el peor momento, porque nunca sé qué decir, ni siquiera sé llevar la iniciativa de esto. Y le paso la patata caliente a él. 

- Bueno... - suspiro. ¡Huye! ¡No quieres hacerlo! No estás preparada. Esta vez no estás en un hospital con las defensas bajas. No estás preparada Patri... me digo a mí misma. Rubio y ojos claros, pero no es él. Patri, usa la cabeza (la que está encima de los hombros) - Es mejor que...

Y él me coge en brazos y me lleva a la pared del chorrito. ¡Oh sí, un empotrador nato! ¡Aleluya! Y me besa, y me muerde, y me hace arder y perder el control de mi cuerpo. Ahora sí, ahora soy un simio. Tú diriges, majo. Y aparece su mano bajo mi vestido. Él se las apaña para encontrar de nuevo el camino que tanto conoce. Y como siempre, nos da igual el sitio, la hora y quien haya alrededor (¿repetimos lo de la iglesia? se me pasa por la mente). Somos así, somos un buen equipo en el tema del sexo. Somos animales en busca del placer individual, egoístas, incansables, fogosos y pasionales. Y así lo demostramos cada vez que nos vemos. 

Es con la persona que mejor me he entendido en este aspecto. Y, en mi opinión, juraría que es porque no existe ningún tipo de sentimiento más allá de la atracción que nos pone como fieras... Y la noche, continuó... Hasta que las estrellas desaparecieron y los primeros rayos de sol se colaban entre las montañas. Necesitaba una noche así. Con besos, mimos, cariños, cena... (sobraban las velas), volver a sentir que le importas a alguien. Noches en las que desconectas por fin de todo, y le susurraría... "No te alejes", pero no... Esto es lo que es. Es como emborracharse... Al día siguiente tu vida te espera tal cuál la dejaste, y sigues con los vacíos, las batallas, el motero, la familia, el nuevo trabajo, el juicio... todo... Te está esperando todo. Aún así, gracias por hacerme vivir una noche muy especial, a pesar de ser nosotros, y que lo especial no nos queda bien...

Patricia Izquierdo Díaz







Verbaliza siempre

Hola a todos, muy buenas tardes.

Por fin tengo internet en mi casa de Extremadura. He salido ya del siglo XIX. Y así os puedo ir contando cómo van las vacaciones, que están llegando a su fin, ya que el lunes trabajo en un sitio nuevo. Me parece aún tan lejano, pero no lo es. El lunes está aquí ya.

Quería daros las gracias,a hora que definitivamente tengo las riendas de mi blog porque las visitas que tienen se han multiplicado, en Facebook los "me gustas" y los comentarios también. Estoy muy muy contenta porque esto son beneficios para mi próxima novela. 

Han pasado muchas cosas este verano. Todos lo sabéis, y quería daros las gracias por estar ahí al pie del cañón y dejarme desahogarme con todos vosotros que al final nos convertiremos en una especie de familia. 

Hoy tengo que pedir perdón por el episodio de ayer. Es la primera vez que hago el salto del tigre sin ningún ápice sexual. Sino todo lo contrario. No estoy orgullosa de haber pegado a nadie. Me habéis dado todo vuestro apoyo, y gracias de verdad, pero como profesora, "no hay que pegar" y esta tarde me disculparé al repollo personalmente. Aún así, quiero hacerlo por aquí. 

Mi disculpas engloban solo y exclusivamente a mis formas. Que me llames "puta"... Duele, molesta, me ofende, entonces, creo que todo lo que te hice ayer es poco, debería haber sido mucho más dura contigo verbalizando toda mi ira, que a veces, y el repollo, lo sabe bien, se me da de lujo. Pero no fue así. Perdí los papeles, y pido disculpas. 

Patricia Izquierdo Díaz


#29

Y junto con el pelo, corté también todo lo que ya no me servía, amistades falsas, rencores profundos, prejuicios tontos y culpas sin sentido. Ahora soy la misma, pero más liviana y me encanta.
Autora: Amy Rodriguez.


#28

Me gustaría pasar el resto de mi vida con alguien que no me necesitara para nada pero que me quiera para todo.


#27

Dicen que envejecer es darte cuenta de que la vida es demasiado corta como para esperar a alguien que no sabe lo que quiere.


#26

Puedes estar dos años con alguien y no sentir nada, o puedes estar dos meses con alguien y sentir todo. Eso es porque el tiempo no puede utilizarse para medir el amor ni la pasión.


#25

Te das cuenta de lo fuerte e intenso que es un sentimiento, cuando ninguna palabra tiene la capacidad de describirlo.


... la tuya

Te quiero hasta cuando la vida me asfixia, cuando estoy jodida y la única ayuda que necesito es la mía, pero la única presencia que quiero es la tuya.