¿Qué hacemos en Ikea los solteros?
Mirar cómo discuten las parejas
haciendo sus colmenas como abejas;
parecen, más que amantes, prisioneros.
Algunos sí parecen ser felices
besándose entre alfombras y cojines,
les faltan como fondo unos violines;
no miran más allá de sus narices.
Y yo parezco Gollum, les envidio
y al rato digo "No, yo estoy bien solo".
Me marcho al casi al borde del suicidio.
Veo flechas en el suelo y no controlo
mis ganas de que ocurra un homicidio.
Me niego a obedecer el protocolo.
Luis Ramiro
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.