No estaría mal tener memoria de pez, así siempre sería la primera vez. Aprendería algo y lo olvidarías. Todos los días mirarías con ojos nuevos.
Los malos ratos ya no estarían presentes de nuevo. Cualquier cosa sería lo nunca visto. Se acabaría la rutina, cada día volvería a ser otro distinto. No tendrías malos recuerdos. Y vivirías la primera vez una y otra vez. Pero no... no somos peces, ni falta que nos hace.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.