Es mi madre, en una foto de joven,
antes de que el tiempo
fuera poniendo años sobre su rostro.
Se la ve radiante, la piel perfecta
con la vida galopando a todo tren en su mirada.
Me pregunto si era feliz entonces.
Cada día me lo pregunto,
si ahora, cincuenta años después,
pensará si todo ha merecido la pena.
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