Es feliz gracias a mí

Me gusta porque sonríe con los ojos tristes, tiene los pies pequeños y el corazón inmenso, inocente, en carne viva.

Me gusta porque llora como una niña pequeña y ama como una mujer, porque es la más cobarde a la hora de ver una película de terror y la más valiente cuando se trata de apretarme la mano en las dificultades, porque cuando ve una abeja reacciona como si la persiguiera un dinosaurio y cuando la vida la amenaza de verdad aguanta de pie sin la menos dubitación.

Me gusta porque cuando sonríe su mirada irradia una luz que nunca vi en otra, porque su forma de decirme cuánto me necesita es insultando y porque sabe responder sin que la tenga que preguntar, pero sobre todo me gusta porque cuando, como ahora, usa mi pecho como almohada, le miro su sonrisa inconsciente, y a la chica de la mala suerte se le olvidan los fracasos y se le curan las cicatrices.

Y en estos momentos, y aunque sea por un instante, la chica de la mala suerte es feliz gracias a mí.

JFTorres