La locura es simple, lo que nadie la entiende.
Podría tenerte a medio centímetro de mí y aun así te sentiría lejos.
Tu magia es hacerme sonreír y al mismo tiempo volar.
Me flipan las ganas que le pones a echarme de menos.
Y que me cuenten tus labios en qué guerra me he metido
¿Y qué dolor puede ser tan placentero como echarte de menos?
En el mundo no hay tristeza llevadera, lo que hay es alegría mal llevada.
No culpes a la distancia, culpa a la poesía.
Quiero que mis tristezas se desvistan sobre el papel.
Moldear tus labios para terminar comiéndote el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.