Hace unos días, llegó a Valdemoro la lamparita más bonita que he visto en mi vida. Y antes de nada, quería dar las gracias a artesanas como Mabeca que se dedican a hacer cosas tan bellas y nos abre las puertas a la fantasía para que no dejemos de crecer nunca. Y por supuesto a Javi, que fue a él quién la encontró navegando por internet.
Las relaciones tienen altos y bajos, tiras y aflojas, días en los que estamos mejor y días en los que no lo estamos tantos. El secreto es la resistencia y la fuerza de la relación: sus cimientos, que se forjan por parte de los dos. Y seguir manteniendo la magia de rascar un poquito más en la otra persona y seguir enamorándote de ella, si cabe, un poquito más cada día que pasas a su lado.
Y rasqué, siempre lo hago. Soy curiosa por naturaleza, siempre voy un poco más allá de todo. Me gusta entender la magia... y sus trucos, las incógnitas y el origen que las genera, a mi pareja y lo que hay detrás de cada decisión que toma o cada palabra que me brinda. De eso va, en mi opinión, de entendernos, de ser generoso con el de al lado, de saber estar en lo que necesita y atender a sus preocupaciones.
Y cuando lo haces, aparece aquello por lo que has trabajado granito a granito de arena. Aparece, y entonces entiendes porqué le elegiste o porqué la vida lo puso en tu camino. Destino o casualidad como diría Melendi.
Ahora mismo se me viene a la mente el pie de foto que puse hace un par de días que puse en Instagram (@pid92) para este momento: "Eso de amar sin esperar nada a cambio es bonito en los cuentos de hadas. Pero en la vida real un amor maduro exige un delicado equilibrio entre dar y recibir, porque todo aquello que no es mutuo resulta tóxico".
Al leerlo, me resultó una gran verdad. Sobre todo para el momento en el que me encuentro de madurez. Quiero a Javi por encima de todo, pero él sabe, que le pido, le exijo y quiero esa magia de la que tantas veces hablamos. Aunque no sirve de nada exigir... si no vas a dar. Apúntalo, querido lector.
Y tras la magia que os he narrado, al igual que este pedazo de regalo (dejarme que presuma de ello), nace aquello con lo que todo el mundo soñamos, la historia más bonita que he vivido... Y me viene a la mente una frase de JF Torres: "No te lo voy a decir hoy, y quizás no te lo diga nunca, no lo sé. Pero no tengo ninguna duda de que, incluso cuando estamos enfadados tú eres mi razón más bonita", puesto que prefiero discutir contigo a hacer el amor con otros.
Te quiero, macarra.
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