Carta a Patri

Hola,

Te escribo estas líneas a media noche para mostrarte lo que siento y cómo me siento. A tu manera. Escribiendo, sin que nadie te moleste mientras te expresas libremente.

Cuando empecé a conocerte me pareciste una chica alocada, descarada, indomable y natural (no voy a entrar a valorar si me convienen este tipo de mujeres o no en base a mi carácter, para gustos colores y a quien le pique que se rasque). Me gustan las chicas que tengan algo que las destaque sobre el resto a nivel de personalidad, nunca físico, no soy de esos que piden la luna sabiendo lo que hay en casa. 

Las primeras citas no fueron muy perfectas. A pesar de ello, ahí estuviste, viendo y sacando lo mejor de mi. Lo valoro mucho, muchísimo. Poca gente se ha esforzado en sacarme de un pozo del cual no se cuando ni cómo me metí en él. Compartirás conmigo que pasar los mejores años de tu vida siendo un mueble como te gusta decir no es fácil de superar. Con suerte tu lo lograste antes de que ese pavor se apoderara de ti. Me alegro mucho y siento envidia sana. La vergüenza y el miedo son como el fuego, si aprendes a controlarlos, a entrar en calor sin quemarte, te irá bien. Si dejas que el fuego te queme, perderás el control (creo recordar que es así. Es una frase de las pelis de Rocky, me encanta). Sentirme identificado contigo en no haber tenido una vida fácil me hacía pensar que podías aportarme muchas cosas. Aunque no lo parezca lo has logrado.

Puede sonar friki, pero sabes por qué me gusta tanto el rock y el metal?. Porque algunos de mis artistas favoritos han tenido vivencias tristes y desoladoras, como yo me siento muchas veces. Ya se que a algunos les componen las canciones, ya se que no es lo mismo la situación de esa gente a la mía, pero me hace sentir identificado.

No one knows what it’s like

To be the bad man

To be the sad man

Behind blue eyes

Me gustan mucho esos versos, me identifico en ellos. Por si te pica la curiosidad, la canción se llama Behind blue eyes, de Limp Bizkit.

Gracias a ti he empezado a abrirme a mi gente poco a poco, me animaste a cambiar mi relación con quien pienso es mi mejor amigo a pesar de no tener una relación sana. Casi hago la cagada de la década. Me sigo sintiendo culpable de haberle traicionado y es algo que me cuesta olvidar. Sigo pensando que me llevé por delante una relación a costa de la nuestra. Y fíjate cómo ha acabado todo, como una tragedia griega.

Puede que te sientas sorprendida por como estoy escribiendo. Cuando no tienes presión sobre tus hombros te permite hablar con claridad, esa claridad que jamás en mi puta vida he demostrado con nadie. No busco sorprenderte ni reconquistarte de una manera enrevesada, solo quiero por primera vez en mi vida ser claro.

Me has reiterado que a la vez de ser un mueble soy una persona sin aspiraciones ni tener aficiones. Te equivocas: me gusta el fútbol, entrenar en el gimnasio aunque no sea regular, el rock, el metal, disfrutar de una noche de risas con mis amigos, ver cómo crecen mis sobrinos a la vez que me hacen mayor, viajar aunque no lo haya hecho mucho, descubrir nuevas experiencias, los coches clásicos y de carreras que jamás conduciré. No tener afición a la lectura o viajar a toda costa quiere decir que esté falto de hobbies.

Fuiste la primera chica que me miraba y me hacía sentir querido de verdad, aunque fuese por un breve periodo de tiempo. Que le voy a hacer, son las cosas del amor. Esperabas que fuese el número uno en todo y no supe ver lo que exigías. No te culpo de esperar tener a alguien 24/7 velando por ti sabiendo el drama en el que vives. Tienes gente estupenda que de verdad hacen ese papel mejor que yo. No se si me vino grande o no, solo se que he hecho lo que he creído correcto para llevar tus problemas a mejor.

Toca pasar página. Hoy me siento mal, mañana espero sea mejor, y pasado aún más. No soy la persona correcta para ti, me ha quedado bien claro. No es que quiera esconderme y tirar la toalla, más bien no quiero ser una carga o un compromiso, ni una esperanza que nunca llegará. Prefiero ser honesto y decirte que el Jesus renovado no va a llegar, no por ahora. No estamos para perder el tiempo. El pollito no puede transformarse en un gallo de un día para otro. Pensarás, cuánto tiempo necesita el subnormal este para dejar de ser un cagao?. Ni idea.

Mientras tanto, no me importa ser amigos ni compartir tiempo juntos. Si algo he aprendido en la vida es a ser agradecido. Sin rencores, a pesar de no comprender porque no me dejaste en su debido momento sabiendo lo que hay.

Puedes hacer con esta carta lo que te parezca, borrarla, publicarla en tu blog, enmarcarla… Por una vez me da igual de verdad lo que piense la gente de mi.

Si te quieres quedar con un bonito recuerdo de mi, que sea esta carta.

No se si me dejo algo por soltar. Por ahora creo que está bien. Si tienes algo que comentarme ya sabes dónde encontrarme.

Te quiero mucho.

Gracias.

Jesús Amores