Mi pollito

Buenas, pollito.

Pollito, el ingeniero, el de Fuenlabrada, el amigo de Belén... Aquí en el blog le he llamado de todo. Y todos ellos, eran él. 

Ayer dejamos todas las cosas claras, desde las 9 de la noche que quedamos hasta las 12. Tuvimos una charla como nunca antes habíamos tenido. Estoy bien. Me has preguntado esta mañana. Yo estoy bien, y al fin y al cabo, he sido yo quien he tomado la decisión. 

Ha sido cuatro meses donde yo he esperado muchas cosas de ti. No es nada nuevo lo que voy a contar, lo digo por si lo leen tus amigos, que ya sé que son muy fan del blog (él ya lo sabe, chicos). Pues eso, he estado esperando pues a detalles, a momentos mágicos, a más viajes o hacer cosas que nos ilusionaran a los dos, pero yo no me sentido en una nube en ningún momento. No has hecho porque yo volara y sintiera mariposas. También puede ser culpa mía, pero la verdad, es que yo tengo la conciencia muy tranquila como te dije ayer. Yo he estado ahí. Discutí con mi mejor amiga, por estar ahí, contigo. Y tú, tomaste el camino fácil, que no te juzgo, es tu filosofía de vida... La filosofía del "pasar". Y yo no soy así, como te dije ayer. A mi la gran mayoría de los problemas me quitan el sueño. Necesito cerrar capítulos, necesito explicarme y hablar. La solución a mis problemas desde luego que no es... "pasar". 

Ayer te intentabas justificar que sí que sientes y padeces. A mi no ha llegado, ni siquiera a día de hoy donde he puesto punto y final a esto. Donde si te importara un poquito, estarías desesperado por recuperarme. Pero estás en casa, con el móvil apagado y despertándote a las doce de la mañana. Espero que tú sí que hayas podido dormir bien, yo no. Porque aunque yo haya tomado la decisión, no deja de ser otra desilusión para mí, que gracias a dios no ha llegado a más en sentimientos. También porque empecé vacía contigo. Y tampoco has sabido rellenar mis carencias. Creo que ser clara es una de mis cualidades, es decir, para lo bueno y para lo malo, lo digo todo. O lo escribo... No has sabido dar con las teclas para que a día de hoy yo siga a tu lado.

No voy a dejarte de hablar, ni quiero perderte. Eso también lo hablamos ayer. No vamos a perder el contacto, porque simplemente somos incompatibles. Estoy segura que encontrarás a una chica que no le importe tener una persona pasota al lado. Que no necesite hablar contigo de todo, ni que seas su mejor amigo. Yo sí. Yo sí que necesito que mi pareja sea mi mejor amigo y que sea mi opción A, para acudir a él siempre. Tú poco a poco has dejado de serlo.

Te he contado que no me habla mi amigo Dani. Tu respuesta fue "pasa". Te he contado temas personales mucho más graves, y me has dicho "cuídate". Pues OK. Y así con todo. Luego está el punto de que quieres cambiar, has tenido cuatro meses para que yo viera esos cambios, y no se te ha movido el flequillo. Yo no voy a cambiar a nadie. No quiero. Me niego a educar a gente de 25 años. El que quiere cambiar, cambia. Te lo digo yo. Pero tú no quieres. Vuelves a elegir la vía fácil. Y vuelves a dejarme con el monólogo en mis manos. Yo no soy monologuista, si te cuento algo es para que tú estés ahí, y me hables, y me digas, y me comentes... Pero para un "pasa". Te aseguro que paso.

También te dije lo del viaje. Hoy deberíamos estar en Sevilla y lo cancelé a 24 horas de irnos. No luchaste por ir, no moviste ni un dedo por arreglar nada. Vuelves a... "pasar". Pero sí, sientes y padeces, pues perdóname si no me llega el mensaje. Las personas que viven en Modo Avión, están encendidas pero no emiten, a mí, a día de hoy no me llega nada.

Siento mucho cómo te puedes estar sintiendo, y créeme que lo sé. Sé cómo te sientes cuando te dejan. Es una puta mierda. Y lo he hecho de la mejor manera, como me hubiera gustado que lo hubieran hecho conmigo, sentándose cara a cara y que me lo dijeran. Porque la otra persona también tiene que decir algo, normalmente. Otros se quedan en silencio. No hubiera sido mi caso. Pero aun haciendo las cosas bien, es una mierda. En tu mano está cambiar para todos los ámbitos de la vida o seguir pasando. Está claro que "pasar"... tienes una vida cómoda y estable. Pero no quiero eso. Es aburrido. Quiero más. Yo sí quiero más... y tú... Pues no lo sabremos hasta que consigas abrirte y pedirme qué es lo que quieres, que es lo que buscas de mí... Porque la telepatía, te aseguro, que no es uno de mis dones.

Necesitaba contárlo en el blog, espero que no te moleste, pero sé que no lo vas a leer, que no pierdes el tiempo leyendo nada, ni el Marca, así que... Te deseo lo mejor, de verdad, y como amiga aquí estoy. Gracias por llenar las calles de Valladolid y de Granada con nuestra historia.

Patri Izquierdo Díaz