Escúchame, he de partir. Si eres fuerte tú, seré fuerte yo. Recuérdame, vuelve a reír. Sigue siendo tú, cuando no este yo. Es la vida la que hoy decide por mi, la distancia no hará que me olvide de ti. Espérame, yo vuelvo a ti. Podré olvidar tu voz tu piel podré olvidarme hasta de mi pero jamás tu corazón, pues sé que nada habrá comparable a tu amor... nada como tu amor No quiero ver, tristeza en ti. Como dueles tú, nadie me dolió... yo volveré, confía en mi. No apagues la luz en tu corazón. Si es la vida la que hoy me aleja de ti, el destino será quien nos vuelva a reunir. Espérame, yo vuelvo a ti. Podré olvidar tu voz tu piel podré olvidarme hasta de mi pero jamás tu corazón, pues sé que nada habrá comparable a tu amor... nada como tu amor Puede que nos separe un mar, puede que desesperes, puede que incluso empieces la vida de nuevo tu vida de nuevo. Pero recuerda dónde estás, siempre estaré pensándote. No importa cuando, juro volver a ti... ¡Óyeme! Espérame, yo vuelvo a ti. Podré olvidar tu voz tu piel podré olvidarme hasta de mi pero jamás tu corazón, pues sé que nada habrá comparable a tu amor... nada como tu amor Pero jamás tu corazón, pues sé que nada habrá comparable a tu amor nada como tu amor, tu amor... Pastora Soler |
miércoles, 25 de febrero de 2015
Espérame
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