viernes, 24 de marzo de 2023

Mi nueva vida

 Ayer Javi volvió a trabajar. Se acabó lo bueno, se acabó el no tener horarios, el tener tiempo libre, el ir y venir sin dar explicaciones ni estar sujeto a unas obligaciones. A mí, me han parecido unas vacaciones a pesar de las noches en vela, del susto que nos dio Helena a los primeros quince días de vida. No sé. La vida me ha cambiado. Ha cambiado. Y mi relación con Javi también. De repente, se acabó el ser "novios". Vivir por y para nosotros, que así era incluso en las semanas de Cuquito. Las cenas a solas viendo cualquier rollo en la tele. El sillón era para dos. Y la vida también. Maya fue el complemento que faltaba para alcanzar la perfección del significado de la palabra "hogar".

Con la llegada de Helena está todo patas arriba. La Patri obsesiva de la limpieza ha desaparecido. Todo está manga por hombro o Maya se lo ha llevado a su cama y lo hemos dado por perdido. Pero me gusta. Me gusta dedicarme a mi hogar, a mi perra, a mi bebé. Me gusta lo que he vivido con Javi estos cuatro meses que no cambiaría absolutamente nada. Me he hecho mayor. He aprendido a valorar otras cosas, a replantarme mis prioridades, a buscar mi equilibrio en medio del caos de pañales y biberones. 

Dedicarme profesionalmente al cuidado de bebés, me ha ayudado pero menos de lo que pensaba. Ser profesora o técnico de educación infantil solo sirve en el colegio o en la escuela infantil. Sí, en el cole, puedo estar con niños llorando mis ocho horitas, pero a mi Helena no puedo verla llorar. Me provoca ansiedad y un nerviosismo que solo puede empeorar la situación. Con Helena todo es nuevo, me pierdo y me encuentro y no hay nada perfecto. No trabajo para nadie, ni espero que nadie esté contento ni cumplir las expectativas de nadie, como puede pasar en el trabajo. Hago con ella lo que creo que es mejor para ella y para mí. Y lo único que me preocupa en el día a día, es si seré lo que ella necesita, la madre que ella se merece. Es mi única preocupación y mi único empeño. Lo demás, ha pasado a darme igual.

Y el coprotagonista de este sueño hecho realidad es Javi. Somos tan diferentes. Tanto... Que es rara la pareja que formamos. Pero Javi es lo que he necesitado siempre. Es mi complemento para sentirme completa. ¿Tiene fallos? Claro. ¡Cómo todos! Nunca escribiré ni sobre la perfección de Javi ni sobre la de nadie, porque es una quimera. Pero a pesar de sus defectos y de los míos que a veces resultan incompatibles, le quiero con todo mi corazón. Volvería a elegirle cada día. Y hasta mi inconsciente lo tiene claro puesto que le busco en la cama hasta dormida. Me siento protegida, segura y no necesito nada más con él. ¿Necesitamos más cosas? ¡Un viaje! Sí, claro que necesitamos cosas. Pero es un lujo poder decir que la rutina a su lado es menos rutina. Incluso me gusta. No necesito un espacio. Nunca he sentido que necesite unos días, una salida a solas. Me gusta ir con él aunque sea ir a comprar el pan. ¿Qué hay más rutinario que eso? Y ayer y hoy, se nota la soledad... Se nota que el día es más largo. Que le echo de menos. Hablar. Simplemente hablar de... "¿dónde has dejado esto o aquello?". O venir al salón y ver su sitio ocupado por la perra porque ella también le echa de menos. 

Soy afortunada. Tengo el hogar que siempre he soñado. Estoy donde quiero estar y con quiero estar. Y mis prioridades están más claras que nunca. ¿Podemos estar mejor? Por supuesto. Pero esa semana de hospital con Helena, como os cuento, me cambió la vida. Soy feliz estando aquí, con mi familia. Compartiendo el sillón con una bebé con mamitis y una perra con Javitis. 



domingo, 19 de marzo de 2023

¡Feliz Cumpleaños, macarrón!

 ¡Felicidades! Hoy es un día especial marcado en el calendario de todos nosotros. Otro cumpleaños más que sumamos a nuestra historia. Una historia que estamos viviendo a tope tras el nacimiento de Helena.

Capitulo a capitulo, vamos escribiendo nuestros altibajos. La convivencia, la rutina, la paternidad y el propio amor no es fácil. Es un esfuerzo de cada día por enamorarte de nuevo de la misma persona. Es dar sin esperar nada a cambio. Y eso es una de las mayores características que tienes: tu generosidad, entre muchas otras.

Gracias por cuidarnos como lo haces, gracias por ser un gran padre y un gran compañero de vida.

Que cumplas muchos años más y podamos celebrarlos juntos en familia.

Te quiero.

Felices 34.





miércoles, 15 de marzo de 2023

15 de marzo de 2022

Cuatro meses de tu nacimiento y parece mentira lo rápido que pasa el tiempo. Te has convertido en el amor más puro que he sentido nunca. Sufres, y yo sufro más. Lloro por las noches por no llegar a más, por no ser mejor madre, por evaluarme a cada rato y castigarme al darme cuenta que 24 horas son muy pocas. Es verdad que la ansiedad de mi propia exigencia se me borra con cada una de tus sonrisas. 

Lo más bonito que estoy viviendo este mes, es empezar a sentirme tan especial para ti... Al igual que tú para mí, y no solo estos cuatro meses sino desde el momento que supe que venías en camino. Eres la personita que más miedo me das... A que vuelvas a enfermar, a que crezcas, a cometer errores, a que un día ya no quieras mis abrazos...

Pero ese miedo también lo borras acurrucándote en mi cuando más lo necesitas. Has empezado a reclamar a mamá. Y yo he empezado a sentir lo que es ser madre. Has de ser su flotador, su salvavidas, has de estar simplemente por amor, has de acurrucar, alimentar y cuidar. Hacer sentir bien y segura a tu bebé. Has de cumplir con un trabajo que no tiene horas, sino una vida por delante.

Has de ser consciente de que has iniciado una historia y un camino para siempre. Y que tu bebé será tu compañera hasta que ella tome su propia senda. En tus manos tienes su educación, sus valores, hacer de ella alguien especial. En tus manos tienes la responsabilidad más importante y maravillosa que puede existir, y que no se puede explicar... Hay que vivirla. 

De repente, te has hecho mayor. Ya no importas, es sólo ella. Tú estás bien si ella lo está. Tu corazón te lo ha robado alguien muy pequeñito mucho antes de conoceros. Mi bebé es un volcán de emociones que cada día vivo con la mayor intensidad.

Eres lo más precioso que he vivido. Mi sueño hecho realidad.



domingo, 5 de marzo de 2023

Mi Helena

Tú eres mi hoy, mi mañana y todas las mañanas después. Tú eres el aire que respiro, la luz al final de cada túnel, el arco iris después de una tormenta y la hermosa melodía en todas las canciones que escucho.

Tú eres mi motivación para nadar contra las olas, mi base fuerte incluso cuando me siento débil y en riesgo de caerme, y mi estrella brillante en un universo oscuro.

Mi amor incondicional por ti es aquel que me saca de la cama en las mañanas duras, donde el cansancio hace que mis huesos duelan y mi cerebro no piensa con claridad.

Es una amor que es tan cómodo que me hace dormir incluso después de un día duro, de tener miles de cosas por hacer aún.

Nunca antes había sentido nada igual. puedo estar agotada de todo, pero nunca de mirarte. Siempre hay para ti tiempo. Serás querida cada día de mi vida.



jueves, 2 de marzo de 2023

Silencios

 Estoy llevando demasiadas cosas en silencio. Muchas para cualquier persona. No puedo escribir, no puedo publicar, ni siquiera puedo hablar. Eso me hace sentirme como si estuviera atada de pies y manos. 

Al no dejarme ni siquiera patalear de rabia, tengo que tragar con todo eso que me hace daño. Que me está molestando tanto como una china en un zapato. 

Y todo eso, intenta salir. Y... Siempre sale, nada queda dentro. El problema es de la forma que sale. En mi caso, convirtiéndome en el enanito gruñón de Blancanieves. Tengo un mal carácter porque estoy apunto de que el vaso se desborde... Todos tenemos un límite, y cuando lo rebasamos, explotamos de la peor manera posible.

Ayer, desayuné con mis gafas de sol puestas. Detrás, había unos ojos llorosos intentando disimular las lágrimas de tristeza e impotencia. Hay cosas que duelen, hay cosas que la gente no tiene por qué entender que te duelen, simplemente respetar ese dolor. Cada uno en la vida le ha tocado vivir diferentes cosas que le han hecho ser de esta manera o de evolucionar a aquella otra.

Llorar, no es hacerse la víctima. Gritar, tampoco. Sentir rabia y frustración, no lo es. Todo esto provoca una ansiedad que dura semanas. Pinchazos en el corazón nada alarmantes porque ya sabemos de dónde viene. Falta de aire... Tampoco es hacerse la víctima. 

En mi cabeza, no todo vale en la vida. Hay cosas que rompen relaciones, hay personas que generan una toxicidad que envenena y mata. Hay relaciones que duelen y que, no tengo ni idea si es ser cobarde, pero que huyes en dirección contraria a ellas. No las quieres cerca bajo ningún concepto. 

No es rencor o ser rencoroso. No. Es evitar aquello que te ha hecho mal, que una vez te rompió tanto que no quieres volver a romperte o que te hizo perderte o simplemente, que no quieres vivir lo mismo dos veces. No es rencor. Es ir descubriendo qué quieres y qué no. 

Otra cosa que aprendí hace mucho tiempo es que el amor no lo puede todo. Ojalá así fuera. Pero no lo es. Vuelvo a mi partida: no todo vale.