sábado, 30 de noviembre de 2019

Las alarmas se encienden

Supongo que habéis visto mi Instagram (@pid92) algún comentario que os ha sorprendido tanto como a vosotros, como a mis amigas, como a mí. La persona que más insistía en mantener las cosas dentro de la más absoluta discreción, ahora me pone comentarios sobre uno de mis lugares favoritos como es Santander, y claro... Las alarmas saltaron entre las chicas...


Por supuesto, el anonimato lo mantengo de este personajillo... Poco más que añadir, por más que se lo he dicho veces, no para de volver. Supongo que su historia de amor habrá llegado a su fin, o sea puro aburrimiento... Que lo vería normal, porque su vida no es como la mía, todo es perfección y armonía... A veces montar en Montaña Rusa, nos hace volver a la vida, apúntalo como consejo.

Nadie entiende su comportamiento, ni sus mensajes, ni nada... Y no, me fui a Santander con mi querida Silvia. Los errores con una vez, vale. Aprendida la lección.

Desde aquí quiero tranquilizar a mis chicas, porque este año, ha sido un año de errores, y del que he aprendido mucho, pero como dice mi amiga Sonia, terminas con coche nuevo, móvil nuevo, trabajo nuevo, y en principio, chico nuevo (del que ya os hablaré porque no quiero cagarla ni ser gafe). ¿Qué más puedo pedir?

P.D. Ese mensaje fue enviado por Sandra (una de las langostinas), sólo decirte que gracias por preocuparte por mí siempre y tener un mensaje de apoyo y cariño siempre listo. Te quiero, y a Axel también.

Patri Izquierdo Díaz

miércoles, 27 de noviembre de 2019

¡Larga vida al Mosquetero!

Esta tarde he pensado mucho en ti, tan aparcadito en mi calle, tan bonito, tan precioso.. Otros dirán lo que quieran, pero es increíble el cariño que se puede coger a algo material.

Llevo con él, a su lado, desde antes de la edad permitida, he hecho cosas con él que jamás podría contar, y él me ha llevado a miles de sitios en los que he sido muy muy feliz. Me ha cantado, me ha alumbrado por la noche, me ha secado las lágrimas, me ha dado calor y frío cuidándome más que muchos humanos... Y podría contaros miles de experiencias con él.

Ahora está medio jubilado, porque esta noche nos hemos ido a pasear bajo las estrellas, las pocas que hay porque las nubes las tapan, pero echaba de menos tus rugidos, tu potencia, tu fuerza... de las que muchos tienen duda, pero no te conocen, no se compenetran contigo como yo. Sabemos hasta dónde llegamos, a dónde vamos, somos uno, eso se llama experiencia. 

Una anécdota es... La que casi le pierdo en Toledo, en medio de una "cita" (supongo que podría llamarla así), cuando le vi medio montado en una grúa, ¡ay mi pequeño mosquetero! ¡Mi tamagochi! Siempre ha tenido algo que ha atraído a todos. Noelia le adora, en mi época del Grado Superior, le adoraban, le vigilaban, le limpiaban, le quitaban los papeles de los parabrisas... Mi Bollo, ¿qué decir de él? Si le tiene como un clásico a mi bicho... 

Entiendo que después de leer toda su historia, estéis pensando de qué cosa hablo. Pues sin más dilación, con todo mi amor y mi cariño, con todos mis recuerdos que me ha dado, por haberme hecho sentir la reina del mundo, con todos ustedes... ¡El gran Mosquetero, Atos!

Patri Izquierdo Díaz


Tres teorías

Tengo tres teorías:

Una: Te has hecho caca cuando supiste que venía dispuesta a quedarme y a luchar por la oportunidad que en principio, ambos merecemos.

Dos: Realmente dices la verdad, y no tienes tiempo para quedar...

Tres: Me estás haciendo tragar mi propia medicina, y haciéndome pasar por el aro mientras me quedo callada. 

En fin, me da igual una que otra, pero es muy difícil empezar algo sin verse y alejándose por momentos. Ya no quedamos porque has dejado de tener tiempo, reculas cuando sin darte cuenta me dices algo bonito, prefieres que quede con tus amigos a probar coches que contigo y lo más fuerte, me animas a que siga conociendo a chicos cuando hace unos días (no unos meses, no), te ponías malo si alguien me miraba. Porque... Esto es una prueba sin garantías, no sabemos cómo saldrá.

Pues ya te hago yo un avance, ¡como el culo! ¡Esto va a salir como el culo! ¿En qué hora pensamos que esto podía funcionar? No vale la excusa de estaba borracha pues no bebo, pero sí que estaba en el estado de ver unicornios rosas por la calle. 

Pero... También te digo... Que voy a seguir callada, pero que me estás llevando al límite de la paciencia, aquí lo dejo escrito. Y Bollo, no soy de mucha paciencia, lo deberías saber porque somos dos clones, majo.

Ya puedes espabilar o tu WonderWoman, vuela.


domingo, 24 de noviembre de 2019

Por si decides regresar

Y si un día decides regresar, te invitaré un café y te contaré cómo ha sido mi vida después de ti, te hablaré de todas esas noches llorando y cómo sentí que se me iba la vida junto contigo.

Te diré que te extrañé a cada instante y que no ir a buscarte fue una de las partes más difíciles... te contaré de todas la veces que te escribí un “te extraño” pero que jamás envié.

Te mostraré mis nuevos logros y también mis fracasos y sé que estarás feliz por cada sueño cumplido, y una sonrisa aparecerá en tu rostro y yo te devolveré el gesto.

Y si un día decides regresar, te invitaré a pasar a mi vida de nuevo, te dejaré entrar a mi corazón solo una vez más, con la única condición de que no muevas nada de su lugar, porque bastante me costo ordenar todo de nuevo.

Y si un día decides regresar, espero que sea para que con una enorme sonrisa me cuentes lo feliz que eres porque así sabré que tomaste la mejor decisión, y que dejarme al menos valió la pena...


Mi forma de querer es bruta, diáfana y sin frenos que amortigüen. No sé si es la correcta o no, pero es la única que conozco.


Mujer

Yo no tengo un cuerpo increíble ni una barriga plana. Estoy lejos de ser una modelo, pero soy yo, y me gusta lo que veo en el espejo. Puedo comer, tengo curvas y me encanta mi pelo revuelto. A menudo salgo a la calle sin maquillar. A veces soy un poco loca, dramática y explosiva y cuando me siento así puedo gritar, llorar y después sonreír. Yo no pretendo ser alguien que no soy. Yo soy lo que soy. Le puede gustar a la gente o no, pero nadie me va a cambiar. Soy una mujer, eso lo dice todo".




De nuevo, al presente

Volvemos al presente.

Hay alguien que reculado, que ha echado para atrás y que de repente está muy ocupado. Sí, el Bollo. Vaya, casualidades de la vida. Decido quedarme, luchar por una posible relación sin ningún tipo de garantía y con periodo de prueba, sabiendo lo que me cuesta dar el paso. Me declaro, estoy (que es justo lo que me pediste), te escribo, te sugiero quedar todos los días. ¡Ah! ¿Y ahora estás muy ocupado?

Como sé que no vas a leer esto... Yo voy a seguir estando, créeme, solo por si llega el día en que tenga que decírtelo todo a la cara y no te va a gustar nada. Yo sigo estando, tú sigue haciendo el tonto, que a lo mejor cuando mires para atrás, no tienes ni a una ni a otra. Y te quedes solo que es precisamente lo que no quieres. 

En fin, es que cada vez me apetece menos molestarme por la gente. Seré egoísta, pero si quedamos en hacer las cosas bien, se hacen bien, sino es mejor no hacerlas. No estamos para perder el tiempo ninguno.

Patri Izquierdo Díaz


24 de Noviembre de 2018


Esta foto es una captura de mi móvil. De mi Instagram completamente. Facebook me ha recordado esta publicación y mi cabeza ha empezado a echar humo y más siendo domingo. La frase es una de tantas que publico, pero alguien dejó un comentario por primera vez en ella. Sí, el pesado de Instagram, hoy hace un año. Para los que os hayáis unido tarde a la historia, un comentario de Samu "Uno", "El Motero", el original como el Cola Cao. 

Me ha sorprendido porque sí que tardé en conocerle, desde hoy hasta el 10 de enero. Fíjaros que hubiera sido este año con tantos Pof, le hubiera conocido a los tres días. No voy a darle más vueltas al asunto. Es una fecha más, que posiblemente jamás recordaré, pero un día como hoy la historia del Motero empezó a escribirse. 

He leído, entre anoche y esta mañana muchos de vuestros comentarios. Echáis de menos más historias de él. Pero es que no era Mario Casas, no iba a poner en una pared "A tres metros sobre el cielo", no era la historia más bonita para contar... Así que, no os preocupéis que moteros no si vendrán, pero otros, seguro. Aunque con Pof cerrado no sé yo, pero la felicidad siempre está a la vuelta de la esquina, siempre está ahí, en alguien nuevo, en alguien que no esperabas. Yo a Samu no le esperaba y menos tras haberme dejado el Repollo, vino a "salvarme" de muchas cosas. En el peor momento, y también se fue en el peor momento. Él era así, de hacer las cosas sin pensar en nadie más que él. Pero os digo que es absurdo seguir mareando esta historia que ya por suerte ha quedado en el pasado y que hay un futuro que promete mucho, en el que estoy yo, haciendo mi vida, cumpliendo mis sueños, probando cosas nuevas y conociendo a gente. 

Vamos a seguir porque ahora sí me voy a poner seria.

Patri Izquierdo Díaz


sábado, 23 de noviembre de 2019

Las estrellas ya me las bajo yo sola. A mi dame algo más.


Los novatos roban besos, los profesionales sonrisas.


La vida es un suspiro, no la gastes en personas que no merecen ni el privilegio de ser un problema. Viaja, aprende, conoce nuevas culturas, nuevas personas y perspectivas, ve y busca lugares que te dejen perplejo. Disfruta, se feliz y no lo pienses... vive. La vida es muy breve para perder el tiempo con cualquiera.


Sonrisas por fuera, batallas por dentro


No sabía a quién querer y empecé a quererme a mí.


Ojalá algún día entiendas que al perderle a él te ganaste a ti misma. Que no ganaste la batalla. Pero sí la guerra.


"Sé lo que quiero, lo que deseo, a quien quiero en mi vida y a quien no. Ya no espero nada de nadie, tengo mis objetivos claros, lo que quiero tener y lo que no. Sé que sólo quiero a mi lado a quien me aporte tranquilidad, respeto y cariño. Y quien no sume, a la mierda. El poder lo tengo yo".


Continuará...

Os tengo totalmente abandonados, pero es que mi vida a veces me supera. No paro un momento en todo el día, y creo que voy a dejar algún trabajo porque la pérdida de kilos es evidente, no comes bien, no piensas bien, no descansas, y realmente creo que me están superando todos mis quehaceres y estoy a punto del colapso. 

Pero bueno, quitando esto, hoy sábado tengo un ratito para ponerme a escribir que lo echo de menos. Me acabo de levantar porque ayer llegué a las 3.30 de la mañana a casa. Después de estar desde las 7 fuera de casa sin parar de trabajar como os comentaba. Al salir del cole también pasé por Sambil a ver a una amiga, todo deprisa y por la noche tenía una cita. Os quiero hablar de él.

Todo empezó, cuando hablé con el Nuevo Motero y decidimos dejarlo (lo que fuera que fuese eso), y Belén, que hoy especialmente la mando un beso y no tengo mucho que decir pero sabes que te quiero, me presentó a un amigo suyo, a través de Instagram. En principio, físicamente, aún siendo mi prototipo, ya sabéis rubio y de ojos azules, no veía yo... feeling, y sí, era la edad, es más pequeño que yo, de la edad de Belén, ¡25! Pero bueno, hablamos, y parece normal. Solo siendo normal me parece que se merece una oportunidad. Se lo enseñé a mi amiga Cristina el viernes pasado, y su respuesta fue... ¡vaya calco de Samu (el motero)! Estupendo, pensé yo... En mi opinión no se parecen en nada, pero bueno, ella lo vio así. Un poco gnomos como diría Belén. 

El chico es simpático, y creo que buena persona. Un poco pollito, pero eso hace que sea muy inocente y espero que llamar a mi nuevo coche "feo" fuera un acto sin maldad, porque le pego. El miércoles, tuve hora y media libre entre trabajo y trabajo, y decidí quedar con él en Loranca (al final me iré a vivir a Fuenlabrada a este paso). Algo sencillo, una coca cola en los Montaditos y tirando. La verdad es que me lo tomé como otra cita de Pof, llevé mis palomitas y me senté a ver el espectáculo de ese día.

Pero no hubo espectáculo. Solo un chico normal, que me miraba tímidamente con unos ojos impresionantes y que hacían que me pusiera muy nerviosa. Me acordé de Cristina porque sentí lo mismo que cuando Samu me miraba de esa manera. Nerviosa. Hablamos de todo, llegué tarde a trabajar, porque la hora se nos fue. Y la verdad es que volví muy sonriente. De hecho, en el gimnasio, el jueves, Belén se percató... "¿Y por qué sonríes tanto?" me preguntó. ¿Yo? Yo no, ¡qué cosas tiene! La muralla aún sigue intacta, no ha sido capaz de bajarla ni de abrirla. Pero me quedé con ganas de más. De hecho, por lo que sé, él no notó nada de lo que se cocía en mi interior, sé actuar muy bien, fría, calculando cada movimiento, ¡tengo tablas en esto de las citas! Ya una se puede esperar cualquier cosa.

Quería quedar con él este finde, pero estaba muy ocupado, aunque... sacó hueco anoche para vernos. Un detalle por su parte, como venir a buscarme a Leganés y currarse el sitio al que me llevó. Cuando miré el reloj, vi que eran las dos menos cuarto de la noche. Eso es que estábamos bien, pero... ¿qué iba a pasar? No eran horas para ir a más sitios... Pues a casa, ¿no?

A casa que fuimos. Paró en mi calle y al despedirnos me besó... "No soy tan parado como parece". Y sus ojos... Yo no puedo con los ojos azules, es que hacen de mí lo que quieren... Y le sugerí subir... a casa... como final a esta noche.

A las 3:30 se fue y yo me quedé dormida. No sé qué va a pasar a partir de ahora. No tengo bola de cristal ni un curso en videncia, lo que tengo claro es que anoche se cerró Pof, y las oportunidades que pudieran tener conmigo. Supongo que con el Nuevo Motero, tengo que hablar, pero hay que ver muchas cosas todavía, y no quiero correr. He dicho que parece normal, El Repollo parecía normal, Samu parecía normal, los Pof... parecían normales. El Bollo no, nunca lo ha sido, de ahí su magia. De momento no os cuento nada más. No tengo ni idea de lo que pasará, pero por unos ojos azules... Merece la pena esperar.

Patri Izquierdo Díaz


martes, 19 de noviembre de 2019

Me quedo

- Todavía por aquí - pregunto entrando en el taller.

- ¡Qué susto me has dado! - dice dándose la vuelta - Patri, ¿qué haces aquí? - me pregunta mirando el reloj.

- Pues ya ves. No me encuentro con ánimos de ir al gimnasio, además, tenía médico, al cuál no he llegado por las puñeteras extraescolares.

- Y has decido venir aquí. ¿Cómo sabías que estaba aquí? - me pregunta a la vez que señala una de sus herramientas para que se la pase.

- Porque te conozco, y estás como yo. Dando vueltas a todo. Y este es tu santuario - abro los brazos señalando todo el montón de chatarra de mi alrededor.

- La verdad es que pensé que no volvería a saber nada de ti en una o dos semanas... Tras la conversación de ayer.

- Pues ya ves, ¡sorpresa! - le intento animar - No te voy a pedir que me creas... No te voy a decir lo que voy a hacer, o lo que me voy a esforzar para que esto funcione... Te lo voy a demostrar, así que dame tiempo, y tú mismo lo irás viendo - le respondo.

El Bollo se da la vuelta y lanza la herramienta que tenía en su mano.

- Es justo eso lo que me da miedo, Patri. ¡Que te vayas! Perder mi vida, todo lo que tengo por ti, y que después tú desaparezcas con un Pof. Además, no te puedo exigir nada. Yo no - grita mientras se toca el pelo.

- No me voy a ir - le digo acercándome poco a poco a él, con cierta timidez, porque... tiene razones para pensarlo - Ayer me dijiste que querías que estuviese, que querías que me comportara contigo como lo hice con Samu. No te voy a dar 24 horas... Pero, voy a estar. No me voy a ir. ¿Sabes por qué? - él niega con la cabeza pero no me mira a los ojos - Porque creo sinceramente que merecemos una oportunidad, la que no hemos tenido en tantísimos años. Probar, intentarlo, ver qué pasa... - le rocé la cara e hice que me mirara a los ojos - No me voy a ir a ningún lado sin saber si esta oportunidad sale bien o mal. Pero no voy a buscar nada más que esto, lo que tenemos. Sé que ahora soy yo la que se lo tiene que currar. Voy a tener que tragar muchas cosas - y él se ríe - ¡No pienses mal! - me uno a su risa - Voy a estar a tu lado como todos estos años. No voy a competir con nadie, te voy a dejar elegir, que seas tú quién decidas quedarte conmigo. 

- ¿Cómo no me voy a quedar contigo, Patri? ¿Quién no lo haría?

- Se me ocurren un par de nombres - me río, pero la gracia no llega a mis ojos.

- Hablo de gente normal y coherente... - aclara. - Quiero ir poco a poco, y sin ilusiones, quiero ver como evoluciona esto. Es una prueba, y quizás salga mal. ¿Estás preparada? 

- Estoy contigo. Me quedo. Estoy lista para ver qué pasa. Nos lo merecemos. 

- ¿Y si sale mal? - me pregunta.

- Si sale mal, pierdo a mi amor platónico, a mi Superman, pero me quedo con mi mejor amigo para el resto de mi vida.

- Prométeme que eso no va a cambiar. Que aunque salga mal, no desaparecerás de mi vida - me mira a los ojos - Te necesito, Patri.

- Yo sí que necesito a mi Superman - le agarro de la cara y me dejo llevar por todo el amor que mi corazón desborda en este momento. Sus gestos, su voz, su cara, sus ojos. Hablan. Todos ellos - Te quiero, mi bollito - le digo cogiéndole las chichas.

- Me tienes loco, de siempre - dice empezándome a besar el cuello - Y no puedo creer que te tenga solo para mi. Te amo, Patri.


Las estrellas ya me las bajo yo sola. A mi dame algo más.


lunes, 18 de noviembre de 2019

Qué terrible es llegar, desordenar e irse. Qué belleza es que alguien llegue, vea tus ruinas y haga de ellas un hogar


¡Ha vuelto!

¿Sabéis quién más ha vuelto a parte del repollo (que aún siguen nuestras conversaciones por Instagram, como cuando empezamos)? ¡Una pista! Tiene moto.

Sí, el jueves a la hora de la siesta de mis niños, un mensaje de El Nuevo Motero, "¿cómo vas?". Sentí un pellizco en la tripa. No sé por qué, pero sentí algo. Hola de nuevo, amigo, pensé, y seguí mi día. Pero por la tarde, le contesté. Quería un pinchito de despedida. ¿Cuántas veces nos vamos a despedir? Le respondí. Estaba totalmente segura de rechazar su propuesta, pero... Este chico me vuelve loca, en el sentido más estricto de la palabra. Y me va lo difícil, lo que no comprendo.

El viernes, antes de quedar con mi amiga Cristina, pues... quedé con él. Jugando con fuego, en el edificio del otro motero (de Samu), y bueno... pasó. Tenía que pasar. ¿Es una despedida? ¿Quién lo sabe? Mientras no me interrumpa mi vida, mi rutina y mis cosas, acepto Nuevo Motero como animal de compañía. Si vamos a jugar a utilizarnos... Jugamos con todo el equipo. 

Sí, ya lo sé. Esto no acaba bien. Uno de los dos se pilla. Y sé perfectamente quién ha comprado las papeletas. ¿Es momento de huir? ¿Quién sabe?


jueves, 14 de noviembre de 2019

Mejor discutir que pegar

Belén y yo estamos todo los días en el gimnasio, todos. De lunes a viernes, hay que colocar esas chichas en su sitio y perder culo.

Hoy ha sido agotador, creo que el peor día de todos. Una hora de cardio, otra de máquinas, otra de boxeo y otra de zumba... ¡Quiero morirme, en serio! No siento las piernas, y los brazos me están empezando a doler... Y quería quedar yo después para echar un polvo, ¡estamos locos! 

- Mejor discutir que pegar. ¡Estoy empapada!

- ¿Ahora eres pacifista, Belén?

Pero el boxeo de hoy, me ha dejado fuera de combate, nunca mejor dicho. ¡Qué sudores! Qué dolor de espalda, que dolor hasta de pies. ¡Y mañana más! Qué adicción más grande, señora Belén.

Por cierto, te quiero florecilla.


¡Y menos mal!

¿Sabéis quien ha vuelto? Os doy una pista... ¡Es motero!

No, el motero no. Y que no vuelva que me hace perder una apuesta. Su querido vecino. Ayer me escribió durante la siesta de mis niños que si echábamos el último, así, como despedida. Ni corto ni perezoso. ¿Despedida? ¿Cuántas veces quiere despedirse de mí? Pues ayer me lo planteé lo de quedar, me apetece. Pero... Las formas en las que me lo propuso, tan frío, tan tan frío que cualquier día me encuentro 50 euros por el completo... No me gustaron. Y hoy, pues estoy haciendo la maleta que me voy de viaje. Y él pone escusas varias...

Yo estoy encantada de que digas que te encanta como lo hacemos, me sube la autoestima y me pone, las cosas como son, pero... las formas tuyas restan, y mucho. Y estoy en una etapa de mis tres trabajos, mi coche, mis viajes, mi gimnasio, es decir, mi rutina, y no lo cambio por nadie. Es decir, o te adaptas o adiós, necesitada no estoy, gracias a Dios. El bollo se ocupa de ello, perdón, Superman (acabo de descubrir un secreto, pero me da igual), y como te iba diciendo, si quieres que haga la buena acción del día son bajo mis condiciones, en mi tiempo libre, cuando me pique a mí. Si tú eres capaz de "dejarme" un día porque esto no te llena y tampoco quieres hacer más cosas juntos porque estás en la época de no hacer cosas (no me preguntéis por esto, porque yo no lo entiendo ni me voy a molestar en entenderlo) pues no es mi problema. Yo tengo claro lo quiero, y gustarme me gustas... Pero como me has dicho hace un rato, la boca te pierde... Ais, las segundas oportunidades hay que currárselas, amigo. No vienen solas... 

El viernes me voy de viaje, si quieres a la vuelta, podemos hacer un apaño, pero ahora te toca rogar un poquito e ir detrás, que eso nos gusta mucho. ¿De verdad creías que te iba a salir bien la jugada? Podré haberme liado un poco contigo en cuando a sentimientos me refiero, pero... Soy orgullosa, y si yo no me respeto, no lo hará nadie. ¡Ah! Y mis amigos me recuerdan lo que valgo cada día, no voy a mendigarte un polvo. Yo no soy de las que vuelvo, pero tú sí, y eso me hace gracia, amorcito... 

Voy a tener que dar la razón a Belén, ahora la del harén soy yo. Pero, yo no juego con los sentimientos de nadie. Aquí todos, tenemos claro todo. ¡Y menos mal!

Patri Izquierdo Díaz


martes, 12 de noviembre de 2019

¡Y sólo ha sido un beso!

Al salir de las extrescolares he visto que mi móvil fallaba, había muerto...

He ido al gimnasio, y he tomado la decisión, voy a dejar de huir. Te voy a llamar y nos vamos a ir de compras, a por un móvil de urgencias. Estaba nerviosa, lo he pensado rápido y no le he dado más vuelta. Además de que te debo una explicación. Siempre hemos tenido tiempo el uno para el otro, menos de una semana a aquí.

Ayer hablé con Belén sobre ti. Dice que jamás me había visto tan tonta con alguien. Sólo con hablar de ti, monto en unicornio, viajo encima de una nube y vivo en un mundo de los colores del arco iris. Así hoy me he puesto las pilas. Se acabó la vergüenza como hablé también ayer con Dani, no voy a dejarte escapar. A ti no. Y es que no ha habido nadie como tú en dieciséis años. ¡Y yo no sé cómo ha pasado! No eres lo que he buscado, no cumples con ninguno de los prototipos que me gustan en un hombre, pero no sé, supongo que es el único que me da la caña necesaria. El único con el que puedo ser yo en mis días buenos y malos.

Y, ay, cuando te he visto hoy. ¿Quién dijo que no tenía mariposas? Seguramente yo, pero hoy las has hecho nacer, a todas. No esperaba ese beso de película nada más verme, que me cojas con tantas ganas que me quites el aire, que la tripa me haga cosquillas, que quiera quedarme a tu lado las próximas siete vidas. Y sólo ha sido un beso. El beso que necesitaba esta semana. Me haces volar cuando respiro tu colonia, cuando siento tu calor que eres lo más parecido a una estufa humana. Estoy escribiendo y sin querer, me muerdo el labio... Repetiría ese momento todos los días de mi vida. ¡Y sólo ha sido un beso!

Delante de todo Parquesur, me has mimado, me has elegido el móvil, me has llevado a cenar, y eso me da miedo. No escondernos me da miedo. Siempre me han tenido oculta. Salvo Peter Pan, pero estoy acostumbrada a no foto, a no capturar los momento más bonitos, pero para algo tenemos memoria. Dios mío, a partir de ahora, necesitaré babero cada vez que te mire como mis niños. 

¿Estoy enamorada? No sé responder a esa pregunta, pero agilipollada, sí, y mucho. Irte, sé que no te vas a ir, pongo la mano en el fuego por ti, pero quiéreme, quiéreme bien y fuerte. Porque, creo que hoy, me has dado las pistas suficiente para que luche por ti, ahora me toca a mí, y de momento voy a empezar por enviarte la carta que te escribí hace días. Y tú decides.

Da las gracias a Belén, si alguna vez coincides con ella. Ella es la que me ve la cara de payasa cada día que hablo contigo. Por último, gracias por tirar de mí, por estar siempre a mi lado, cada día, en cada momento. Eres mi héroe, y al bollo que quiero a mi lado. ¿Me va a tocar luchar? Seguramente, ¿verdad? No me lo vas a poner difícil. Pero de momento, acepto. Acepto montar contigo en moto, acepto seguir con mi vida, continuar, avanzar, y si es a tu lado, no puede ser mejor.

Patri Izquierdo Díaz


lunes, 11 de noviembre de 2019

De Samus va el lunes

Da igual los cambios que haga, da igual dónde viva, da igual el dinero que gane o las horas que trabaje, todo da igual... cuando el final es tener un ojo morado, otra vez. Como dice Belén, ¡y mañana de colores! Hay temas, hay cosas en las que no sé avanzar por más que luche, por más que lo intente sigo dando vueltas en círculo sin frenar nada, sin solucionar nada.

El gimnasio me salva, me evade, es terapia de amigas y le doy gracias a Belén por hacerme mover el culo en zumba, por enseñarme a montar en cada máquina, por no reírse demasiado cuando me caigo de alguna de ellas... ¡soy torpe! Pero no me soluciona nada. Ahora es el pretexto de toda discusión.

Me duele el ojo, me duele la cabeza, me duele la cara y precisamente no de ser guapa, y la nariz. Cada vez se me achica más el ojo y me crece el párpado, estoy preciosa, para una foto. Y justo ayer, en un día tan... de montaña rusa.

Me desperté teniendo pesadillas con Samu 1, donde, ¿adivináis? Todo iba bien hasta que se iba, ¡desaparecía! Las mismas pesadillas de siempre. Fui a agarrarle, y no llegaba. No llegué. No llego nunca a nada. Así empezó el día, con un vacío en el corazón. Y otro vacío en el corazón de mi Belén. Y allí que fui, sin pensarlo. Belén, te adoro y saldré corriendo siempre que lo necesites... Que me necesites.

Después con mi Samu 2, mi hombre perfecto, el que de nuevo me hizo sentir una pequeña ilusión, me contó la verdad de muchas cosas. Y cuando cuentas la verdad, es que antes has mentido. U ocultado. De nuevo, señores, había comprado una moto. Me había creído toda su historia... Me puse a llorar cuando escuché su audio de 10 minutos con sus explicaciones oportunas. Me puse a llorar no por él, como pensó mi amigo Dani. Por mí, por ser tan gilipollas de creérme de nuevo, algo de alguien. ¿Cómo me iba a salir bien algo? ¿Cómo? Además, como dice Belén, con ese nombre... Los Samules pueden hacerte ver las estrellas, sembrarte de ilusiones y luego darte la patada. ¡Eh! Pero que les importas en el fondo, no lo dudes, les importas, pero la patada, te la llevas, va en el pack.

No sé por qué le he dado una nueva oportunidad. Quizás porque hablaba con él 25 horas al día, y quería más, mucho más... Ese más que no puede darme porque está a 700 kilómetros. Y yo pensando que vivía en Morataz... (eso me dijo él). Nuevas mentiras, nuevos engaños, nuevos baches y heridas que se reabren en el corazón. Lloré anoche mucho, por Belén, por Samu 1 y 2, por mí y mis circunstancias, por todo. Lloré hasta la madrugada, por eso el lunes se me ha hecho tan largo. 

Samu, (Samu 2), si lees esto, te doy la oportunidad de vernos en Madrid y ver qué pasa, pero tengo dudas, tengo inseguridad, y esta vez no me voy a creer todo a la primera, ni de ti ni de nadie.

Por cierto, el último Pof con el que quedé vive en la misma calle de Samu 1, y del otro Pof con el que estuve unos meses... ¿os lo he contado? Fascinante... Mi vida supera la ciencia ficción. 

Patri Izquierdo Díaz


sábado, 9 de noviembre de 2019

Saturday Night

Y abrí la puerta...

Entraste como un toro cuando se abren las barreras en los encierros y me llevaste hasta la pared. 

- Así me gusta, lista y preparada - me susurra al oído mientras me desabrocha los botones del pantalón - Más de una semana esperando esto - y empieza a regar besos por mi cuello hasta los hombros.

Yo solo podía respirar su aroma entrecortadamente. Estaba a su disposición, sostenida por él, hace que me sienta que soy un peso pluma. Me alza y me lleva hasta la habitación, ya sin pantalones, sin nada prácticamente nada...

Me pongo de rodillas encima de la cama y empiezo a quitarle su ropa. Le muerdo en los labios, en el lóbulo de la oreja, le dejo marca, mi marca...

- WonderWoman - pasa sus dedos por mi nuevo tatuaje, visible para muy pocos.

Y le sigo mordiendo el labio, la cara, le beso, le muerdo la nariz y voy bajando... Cuando me coge y me pone debajo de él.

- Aquí mando yo - "solo por un rato" pienso yo, pero me dejo hacer, le dejo que tome las riendas durante un momento.

- Entra ya - le ordeno.

- Shhh. No seas impaciente y déjame disfrutar - empieza él a besarme, a descolocarme, a morderme, a moverme a su antojo y yo me dejo. Sabe lo que me gusta, lo veo en sus ojos, en su media sonrisa y en su forma de tocarme - Relájate que la noche va a ser muy, muy larga...
Patri Izquierdo Díaz



De la era de los Alejandros a la época de los Samules

Os quiero hablar también de alguien nuevo...

Vamos a ver, cuando vi su perfil y vi "No busco nada serio", pasé de él y de sus ojos azules. Sí, Beatriz, tú me entiendes, otros ojos azules. También su nombre me echaba para atrás. Cuando no termino de superar la era de los Alejandros, viene la nueva temporada de los Samules. Samu, chicas, Samu... como el motero. También con ojos azules y tatuado... Dije no. No. Pero fue sí, porque él me habló. Y me habló mucho, y tiró de la conversación porque según él, así lo sentía. Iba con pies de plomo. Pero con el paso de los días y nuestras conversaciones eternas que solo se cortan porque o trabajo o dormimos, yo más que él (es una realidad, Samuel), pues el plomo se ha ido convirtiendo en goma, de la que flota... La confianza va creciendo y creo que es mi versión en tío. 

Me ha conocido enfadada, muy cabreada con el mundo, y no se ha ido, ha estado. Hablándome de todo, es decir, me ha cogido el punto en muchas cosas y es... como mínimo alucinante, el "enganche" que hemos pillado. Siento que puedo hablarle de todo, aunque, no he querido profundizar mucho en mi vida. Me da miedo algo tan bonito que ha nacido solo, porque nos nace solo a los dos, se pueda fastidiar por cualquier tontería. Además, a mí no me pasan cosas bonitas, tiendo a pensar que es pasajero.

Es más, el hecho de que no me haya propuesto aún quedar, y yo haya dado el paso y haya recibido un rechazo, ha hecho que frene en seco. No puedo meter sexta si las cosas no están claras... Es mejor disfrutar cada momento y no tensar una cuerda, que por experiencia sé que se pueden llegar a romper. Con él, estoy disfrutando cada conversación, cada risa, cada "buenos días". Como he dicho, es bonito como nació todo. No sé a dónde llevará esto o si algún día le conoceré. Parece difícil con éste. Otros te lo ponen más fácil. También reconozco que lo que se pone complicado engancha más o, gusta, somos así de masoquistas. No tengo ni idea de lo que piensa él, de cómo lo está viviendo, pero no había sentido nada igual con nadie, un apego tan fuerte. Y me gusta, porque cuando hay que darse espacio también nos lo damos... No sé, es extraño todo a la par que intenso y bonito... Como dice Belén, ¡ya os contaré! De momento, solo suma puntos, y eso me da miedo.

Va a ser verdad eso de que no se busca, aparece solo. Yo huía de su perfil... y mirar... ¡hasta con ojos claros! Os mantendré informados.

Patri Izquierdo Díaz


Número 15: ¡Un café!

Realmente no es el número 15, le considero un amigo. Es el "Pof" (que en verdad es de Badoo) con el que más tiempo he hablado. Fue en Murcia, a finales de agosto cuando creo que empecé a hablar con él. Se fue a trabajar fuera de España, a tierras británicas y hemos mantenido el contacto, cosa difícil en estos tiempos, pero, bueno. 

Ha sido una "cita". No sé cómo llamarlo con él, porque ha sido como si nos conociéramos de toda la vida, hemos hablado de todo como por WhatsApp, es lo que tiene conocerse tanto y llegar incluso a tener confianza, que puedes meterte con él porque se le da fatal conducir. ¡Es de Zarzaquemada! Otro más de allí... Creo que hasta que no acabe con ese barrio no bajaré al Carrascal. Y hoy recién llegado en avión ha pasado a verme. ¡Vaya detalle! Un café. Todas mis historias empiezan por un café.

Se me ha hecho muy corto, muy muy corto y me ha sabido a poco. En nada vuelve a coger el avión y a marcharse, así que, hasta el año que viene es posible que no nos volvamos a ver... Pero sé que tengo un amigo, de los que están ahí, y eso es lo mejor del mundo. El tiempo... escribirá el resto. Pero para mí Dani, no ha sido un número más, sino una cuenta pendiente que traía del verano y que está saldada. No creo que leas esto... Pero ha sido un placer tomar ese café en el sitio más cutre de Leganés. Gracias por no juzgarme antes de tiempo, por hacerlo fácil y ameno, por escucharme y por hablar de todo lo que no estamos de acuerdo de otra manera... Nos vemos en España, o quién sabe... Quizá la próxima que coja el avión sea yo.

P.D. Has bajado muchos puntos al llegar diez minutos tarde, por tu culpa casi me congelo.

Patri Izquierdo Díaz



Cambiando de rumbo

A pesar de mi entrada anterior, un poco, dudosa. He de decir que no me he sentado a esperar a que el gitano decida darme una patada en el culo. No confió mucho en esas páginas de conocer gente, soy un poco tradicional, y teniendo amigas más entusiasmadas que yo por que salga de mi círculo vicioso, ¿quién quiere tinder?

Me han presentado un chico muy mono, que me hace muchísima gracia. Físicamente me gusta. Es alto, moreno, con pelazo (importante), guapo y no esta escuchimizado.

Llevamos una semana hablando, y me hace gracia porque es tímido. Piensa todo lo que dice. Asique a su lado, soy una tarada y una desvergonzada. Y eso me hace reír. Pero me gusta. El chico es muy respetuoso, no va al polvo fácil. Y oye, a estas alturas de la vida, me parece digno de admirar. 

Su amiga, y la mía, me lo ha vendido muy bien. Es de los chicos que cuidan a su pareja, va despacio, es detallista, mimoso… lo que yo necesito ¡vamos!  Que me cuiden, que me quieran, que me bailen un poquito el agua. Porque estoy bastante desgastada mentalmente. 

Ayer nos conocimos. Fue un poco trampa, pero lo agradecí, no se si estoy preparada para quedar con alguien que no conozco. Asique allí estaban mis amigas para salvarme. Y fue muy ameno. Es verdad, que no hablamos mucho entre nosotros, pero si tenía alguna duda de cómo soy  con los míos, creo que ayer se le aclaro. Lo mismo le he asustado. 

Acepto apuesta por cómo va acabar esto. Las que más me conocen dice, que si, muchas risitas pero que no va a pasar nada, porque el gitano esta siempre el primero. Yo no digo nada, porque me apetece conocerle. Y cambiar un poco de rumbo.. Asique… ¡ya os contare!

Belén Triguero Guijarro


Con los pies en el suelo

“Me pongo a escribir como la primera vez
Y solo pienso en tu nombre
Me vuelvo a sentir como si fuera ayer
Y mi corazón responde”

Estopa. Hasta Estopa nos une. Nuestro grupo favorito. Hay tantas cosas que nos unen… ¿y cuantas nos separan? 

Hace bastante que no escribo, es tiempo de cambios. De buscarme entretenimientos para no pensar. De aprovechar todo lo que tengo al máximo. De entender y aceptar los problemas. De superarme. De seguir aprendiendo. De trabajar. De construir un futuro. Es tiempo de intentar recuperarme, de volver a ser yo, de dejar de ser esa Belén que está siempre a la defensiva. ¿Pero lo hago por mi o por ti? 

No voy a decir que estoy mal, ahora mismo no nos va mal. El gitanito sigue muy presente. Hablamos todos los días, nos vemos todos los fines de semana, cada día está más cercano, seguimos discutiendo y haciendo las paces, hacemos cosas de parejas. Pero no, no lo somos. Y la verdad, cada día tengo menos claro donde nos lleva esto. 

A primera vista puedo parecer inconformista. De hecho es como me ve él. Él se está esforzando para que estemos bien. Pero quizás si tanto le cuesta, es que no merece la pena ¿no? No pretendo ser una obligación para nadie. Me gustaría tener al lado una persona que está conmigo porque quiere. Que me habla porque le apetece. Que quedamos porque se muere por verme. Que quiere hacer planes conmigo que no haría con otra persona. No sé. ¿Es mucho pedir? 

Es cierto, que leo muchas novelas románticas, que veo pelis de amor y, que soy una ilusa de la vida. ¿Pero tengo que conformarme con una persona que no tiene tiempo para mi hasta que no termina todas sus tareas? ¿Que no saca 5 minutos para verme aun viviendo a dos calles de mi casa? entiendo que después de tanto tiempo, no vamos a sentir maripositas ni vamos a montar en unicornio. ¿Pero tampoco puede haber ilusión? Creo que estoy un poco desencantada, en el sentido de que me he estancado en aceptar unas condiciones para estar bien, que no son las mías. 

Sé que si leyera esto, se enfadaría, pues él no mira con mis ojos. Él es de las personas que prefiere callar y que el tiempo decida. Yo soy de decir todo lo que piensa, de hablar, de expresar lo que siento. Pero como no sé cómo lo ve el, ni como lo siente, ni que le cruza esa cabecita. Creo que no vamos en la misma dirección. 

“Baja de mi propia nube
Una luna que se rompe
Y un misterio que se esconde
Donde lo dejaste escondido
Esta noche encontraré mi destino
Que no quiero llegar a viejo
Sin verte reflejada en mi espejo”

Como dicen David y José, sé que bajaremos de mi nube. Quizás, debamos poner los pies en el suelo…

Belén Triguero Guijarro





jueves, 7 de noviembre de 2019

Respira hondo y suéltalo...

Hoy he tenido un día de mierda, los comentarios del Repollo me afectan más de lo que pensaba, no se lo he dicho a ninguna amiga... Belén creo que algo me ronda por la mente, pero no creo que piense que es eso. Simplemente porque no lo entiendo.

Hoy en el colegio me han rozado mi coche, una mamá de la clase de los bebés. ¡Mi coche! Que no tiene ni una semana. Todo puede salir mal... ¿Me compro un coche? ¡Pues un raspón! Así es mi vida. Los cambios que tomado en mi vida, no dan resultado tan rápido como yo pensaba, porque... hemos retrocedido un poco. Aún quedan moratones que no se curan...

Y el Bollo pidiéndome más... Cariño, estoy haciendo mi vida. Ahora voy a otro gimnasio con Belén a Fuenlabrada. ¿Cuándo nos vemos? Pues no lo sé. Mi día termina a las once de la noche. Llevar una doble vida es duro... Lo digo por ti. Si ya es duro estar con alguien, ¿con dos? Es insufrible. Aunque cada vez que me hablas, me nacen mariposas y monto en unicornio... Creo que no vamos a estar juntos en la vida... Somos incompatibles en todo y tú no eres capaz de dejar lo que tienes... ¡Uno más! Y estoy cansada de ser el segundo plato de todo el mundo... Como tú dices, cielo, tengo problemas muchos más grandes. Y ahora mismo con mis trabajos, mi gimnasio, mis amigas... Soy feliz. No necesito nada más... Lo nuestro hubiera sido una historia de novela... El Diario de Noa por lo menos... Ellos discutían tanto como se amaban... Sólo que ellos formaban parte de una novela y nosotros de la vida real. De todas maneras, eres mi persona favorita... No podré evitar quererte otros dieciséis años. Necesito hoy un abrazo tuyo de oso. La vida cuesta, peque. No quiero volver a lo de hace unos meses... Otra vez no.

Patri Izquierdo Díaz