miércoles, 20 de abril de 2022

Os leo

 Siempre digo lo mismo: "hasta aquí". Y una vez más, lo intento. Y otra vez, otra vez, otra vez... Hasta que desgasto las palabras.

Es mentira lo de dar sin recibir. Si no recibes nunca lo que das, mínimo en la misma proporción... No nos gusta. Es más, lo exigimos. Y a mí me parece justo. Una relación, del tipo que sea, no puede basarse en que uno de y el otro reciba. Hay muchas cosas en juego... Muchos ámbitos que derivan de otros, que son el origen de ellos, y me explico.

¿Por qué te acuestas con alguien? Alguien a quien quieres me refiero. Supongo, y paso a dar mi opinión, que primero porque hay amor como algo genérico y atracción sexual como algo concreto. Creo que todo el mundo está de acuerdo hasta ahí. 

Pero, ¿qué te reporta a uno mismo? Seguridad, autoestima porque ves que te quieren, te sientes deseada y te importa un poco menos la lorcita que te sale en la tripa. Sientes que amas y que es recíproco. ¿A quién no le gusta sentirse especial? Y más al lado de la persona que quieres.

¡Con lo difícil que es ser correspondido!

Estar, te reporta muchas cosas. Los besos, los abrazos y los momentos íntimos hacen que pongas el contador a cero. ¿Habéis oído eso de las reconciliaciones? Es también una manera de borrar lo malo. Es la manera más directa de decir a alguien todo lo que sentimos en un solo acto, puesto que... Las palabras se las lleva el viento. Os lo digo yo que no me creo ninguna de nadie, y está empeorando con la edad. ¡Hechos! Toda la vida pidiendo hechos y ahora nos damos al abandono.

El sexo es bueno hasta biológicamente hablando, la cantidad de sustancias que se generan es asombroso, sino, preguntar a Punset que escribió de ello. Esto tiene que dejar de ser un tabú, hombre. A estas alturas de la vida... Las mujeres deberían reclamar lo que quizás, sus maridos, no les dan.

¿Creéis que el sexo inicial, el que sucede cuando empiezas con alguien, se va apagando? Y si se va apagando, ¿estáis muertos como pareja? Según mi amiga Sonia, así principio todo es un cuento de hadas y luego da la cara la pura realidad. Normalmente se presenta en forma de bofetón a lo Will Smith.

En este tema siempre me asaltan dudas. Soy insegura, lo reconozco, conmigo misma. Siempre exigente, siempre al borde de lo que yo creo que es perfección y exigiendo a los demás que la alcancen también. Por eso quería escribirlo, porque quiero pensar sobre ello, aunque no llegue a ningún puerto.

También he pensado en las relaciones abiertas. Está bien exigir lo que tu pareja te puede dar, pero nunca lo que no te puede dar ni ahora, ni nunca. Y quizás, otra persona, te lo dé en ese momento. He reflexionado sobre ello, pero no soy empatíca, porque si yo me enamoro de alguien, solo me enamoro de él. Jamás podría estar con alguien más. Y soy de las que piensan que si buscas algo fuera, es que no lo tienes en casa. Y feliz, lo que se dice feliz, no lo eres... Puedo estar equivocada con mi opinión, pero abro canal de debate... Os leo.



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