miércoles, 6 de noviembre de 2013

Jake & Blake

A veces es difícil comprometerse con lo que uno siente, asumir las consecuencias y hasta arriesgarse a que no lo quieran, decir que no a algunos le cuesta mas que a otros, pero lo que de verdad vale es escuchar lo que te dicta el corazón. Claro que muchas veces, es difícil entender que dice.


A veces mentimos para proteger a alguien, para no lastimárlos, pero por más pequeñas que sean siguen siendo mentiras, y las mentiras siempre traen consecuencias. Cuando alguien miente para protegerte, tal vez merece el perdón. Muchas veces saber perdonar una mentira es un acto de amor tan grande como haberla dicho para proteger a quienes quieres.


De todas las emociones humanas hay una que jamás debemos subestimar... hablo de nuestra vieja amiga la culpa. Porque cuando la culpa manda, los hombres obedecen. Cuando la culpa golpea tu puerta, lo más sabio es estar listo para pedir perdón. Pero no olvidemos que hasta las disculpas más sinceras, no siempre son bienvenidas.


Algunos creen que es posible construir un mundo entero alrededor de una mentira, ¿pero qué clase de mundo sería?. Y si tu mundo está basado en una mentira, más te vale prepararte para las consecuencias. Yo creo que no hay nada mejor que ser fiel a uno mismo, y aunque la honestidad no es el camino más fácil, siempre es la mejor política.

Si un amigo es un hermano que se elige, ¿que es un hermano de sangre?... ¿Un amigo que no se elige?, tal vez eso no sea importante. Un hermano es un reflejo en el espejo, pero un reflejo que nos hace compañía, nada más y nada menos. No importa que clase de hermanos sean, de sangre o por elección, lo importante es que ellos son una extensión de tu persona y serán tu reflejo si aprendes a verlos tal como son.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.