¡Feliz Cumpleaños, Macarrón!

 ¡Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz! Te deseamos todos, ¡cumpleaños feliz!

Segundo round. Segundo cumpleaños que paso contigo y cómo ha cambiado todo. Nosotros metimos la sexta en cuanto nos conocimos porque sentimos eso que te hace "click" que te cambia y te hace seguir, planear y no planear, dejar que las cosas pasen, querer que pasen (hasta lo que no queríamos en la vida). Nosotros somos el ejemplo de las novelas románticas, de los cuentos de hadas, de los anuncios de redes sociales para encontrar el amor o de las primeras citas.

Este nuevo año lo empiezas siendo un hombre casado. Apuesto contigo lo que quieras que ni en tus peores sueños, y sí, digo peores, porque jamás hubiese entrado en tus planes una boda. Y aquí estamos, seis meses después. 

El año pasado pude contar como te conocí, como iniciamos esta relación que no para de cambiar y evolucionar, pero este año, lo he vivido junto a ti entererito, con sus cosas buenas, las no tan buenas y sus cosas malas. Vamos, lo que viene siendo la vida.

Quiero dejar escrito todo, nuestra historia, a través de las fotos que vamos sumando a nuestro álbum (ya sabes que una imagen vale más que mil palabras), ese álbum que miraremos cuando seamos viejos, o no tan viejos. Cuando la nostalgia nos inunde en esos días malos, y esas fotos son las que dejaremos de legado a nuestros hijos. El legado de una vida entera, la de papá y mamá.

Hoy, seleccionamos unas cuántas, un puñado de ellas para que todos opinen al verlas, solo hay que fijarse en nuestras caras. También, este año, hemos disfrutado de un montón de viajes, como el de la Luna de Miel, que no fue tan intenso como queríamos por temas laborales pero fue el viaje más romántico que podíamos tener.

A esto, le quiero sumar que nuestra historia, además de fotos y trasfondo le acompaña una banda sonora que va desde Tina Turner hasta Aitana... Y es que en la variedad está el gusto, ¿no? Quédate con una pista... y con una de nuestras cantantes favoritas: Whitney Houston.

Cada mes, más o menos, te he dedicado una entrada a este blog, una foto, simplemente porque esos detalles salen, tú haces que salgan, como los vales que te regalé por San Valentín que aún está intacto. Lo bueno de nosotros, es que cada plan que hacemos se convierte en una cita, en un momento a recordar lleno de magia, fotos y música. Puede resultar todo maravilloso, pero es que tenemos que ser esa parte optimista y más hoy, el día de tu cumpleaños, ser esa parte de la que tú te sientes tan orgulloso, esa a la que llamas "equipo" y yo lo llamo familia.

Este año también, como bien cuento, metimos la sexta, la primera incorporación a esta nueva familia a sido Maya. Un plan que teníamos en mente pero se tambaleaba siempre que intentábamos dar el paso. Y ahora mismo, no nos imaginamos la vida sin la perraca loca que ladra a todo el mundo. Nuestra consentida como diría Luis Miguel.

Javi, es súper fácil escribir de ti, las letras y las palabras nacen solas y borbotones. Todo fluye, incluso en los momentos difíciles. Eso haces cada vez que estás presente, incluso en la peor versión de ti, cuando el fuego que tienes hacer que arda como si de una hoguera se tratase. Las emociones contigo son una montaña rusa, y esa parte, aunque a veces es dura, la mayoría de las veces demuestras lo auténtico que eres. 

Eres perfectamente imperfecto y ese es tu encanto. Manejas la vida como puedes, a veces a bandazos, a veces por impulsos, a veces pensando las cosas. Para ti, lo importante es salir a flote y nunca dejarte arrastrar por el mar, nadar a contracorriente hasta que el cuerpo y la mente falle, pero tienes una mente brillante y una memoria que la borra el corazón que tienes librándola del rencor, haciendo que siempre pienses bien de la gente, que la gente cambia y que todos merecen tu confianza. Es una parte admirable de ti porque yo dejé de creer en el mundo hace muchos años.

Esa es otra cosa a destacar. Eres mi parte blanca, mi yan, la parte que me falta para sentirme completa, porque de ti, aunque creas que no te escucho, aprendo cada día un poquito más. Hacemos el equilibrio que a nuestra vida la falta, porque sin uno de nosotros, el otro estaría cojo. Esa es nuestra máxima. Nadie dijo que fuera fácil el matrimonio, no todos los días se pueden obviar las adversidades... Pero sí que podemos compartirlas para que la carga sea menor. Nos hemos juntado dos que llevan unas buenas mochilas llenas de pasado, de ese pasado que pesa, de ese pasado que arrastra de vez en cuando al presente y que siembra la incertidumbre del futuro.

¿Sabes que es lo que más me gusta de nosotros? Cuando la tele se apaga y el móvil no suena, cuando somos solo dos y nos ponemos a hablar de todo, solucionamos el mundo en menos de lo que canta un gallo... Y es que así empezó todo. Teniendo largas conversaciones hasta las cinco de la mañana, hablando sin parar todos los días. Eres la medicina que necesitaba en mi vida, y no hay nada mejor que tu medicina sea una persona: mi persona vitamina. Alguien que te ayuda a crecer, a ser la mejor versión de ti, a ponerte los límites que necesitas cuando entras en espiral y te olvidas de que el horizonte siempre está un poquito más allá.

Podría seguir enumerando más cualidades de ti, porque eres infinito... Un misterio que cada día descubro y del que cada día me vuelvo a enamorar. Porque prefiero discutir contigo que hacer el amor con cualquier otro, porque eres especial y te mereces que apuesten por ti, que recibas mínimo la mitad de todo lo que das, porque no tienes fin si la cosa va con los tuyos, y solo puedo sentir admiración, lealtad y amor, mucho amor. Porque prefiero quererte bien a quererte mucho.

Espero que este día sea especial. Te aseguro que haré todo lo que esté en mi mano para que así sea. ¡Felicidades, morretes! Por muchos años más a tu lado.