Te quiero dentro de mí. Así de claro, de forma urgente, violenta, romántica, perfecta, fuerte. De forma hambrienta y poética. Pero te quiero a mi lado, encima y debajo. En mi cama, en el suelo, en el baño. Te quiero cerca desesperadamente, en el campo o en la playa. En un bar, en una calle perdida, en un parque, en un columpio o en un bosque. Es frenesí, pasión, sexo... Es un arte que no todo el mundo conoce ni entiende. No es amor, eso lo sabemos los dos. Es una guerra en la que todos ganamos, en la que todos perdemos, ¡bendita batalla! Es el egoísmo de dos almas en acción, es deseo, es placer. Roza lo animal, saca lo más primitivo del hombre, de la mujer. No hay razón, sólo un corazón bombeando sin control. Es luz y oscuridad, verso y prosa, frío y calor. Son dos almas enredadas en sábanas, conociéndose, oliéndose, tocándose... En guerra, maravillosa guerra.
Patricia Izquierdo Díaz
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