¡16 años!

Me habéis hecho llorar con vuestros comentarios de la publicación anterior. Es que no te puedo querer más Silvia. También por los comentarios que engloban al tema de mañana. Gracias por tanto amor, por tanto cariño, por tanta fuerza, apoyo, ánimos, ternura y buenos deseos que me hacéis llegar. Mañana todos sabemos que será un día muy duro. No el más difícil de mi vida. El más difícil fue aquel domingo al que Alejandro tanto hace referencia. Pero sí uno de ellos.

Quiero agradecer a mi otro Alejandro, a mi bollito, hoy especialmente por tus mensajes, por tu cariño desde hace... ¡ojo! ¡16 años! (como cada septiembre, uno más). Es que no sé ni por dónde empezar... Son tantas cosas... Es tu saber estar a mi lado, intentar comprenderme aunque a veces no llegues, es... simplemente estar. Estás aun estando enfadados o felices, o regañados. Creo que eres un ejemplo como persona. Que de mayor quiero parecerme a ti y tener ese corazón tan grande que tienes. Que aunque nos enfademos o nos distanciemos, nuestras vidas no tienen sentido el uno sin el otro. Son muchísimos años juntos. Eres parte de mi familia, de la que se elige, de la que se da confianza plena y es que no puedo decir otra cosa... que soy feliz a tu lado.

Cada vez que quiero desaparecer, no me dejas, porque las penas en compañía son menos. Que matarías a todo el que me hace daño, lo he comprobado en varias ocasiones. A tu lado, me siento segura, eres como mi lugar en el mundo, en realidad, eres mi persona favorita. Porque por muchas parejas que tenga, por muchos idiotas que se me junten, siempre, siempre, siempre estás tú. Que te quiero, es evidente, que adoro, también, y que te debo tanto, tantísimo. Si la gente supiese... Nos reímos, lloramos, nos pegamos, nos matamos también, pero es que somos iguales. Personas sin filtros que luego tienen que pedir perdón por lo que dicen. Pero nada rencorosos. 

¡Qué suerte tengo y qué regalo más grande tengo en mi vida! Contigo me basta.

Patricia Izquierdo Díaz