Último día

Es mi último día en La Manga. Ya regreso a casa, pero no a Madrid. A mí mí lu favorito en el mundo.

El blog vuelve a ser mío y solo mío. Aceptaré colaboraciones y estaré encantada de recoger vuestros escritos, pero antes lo supervisaré por el bien de mi blog. 

Peter Pan, gracias por matenerlo vivo aquí y Facebook. Pero ya estoy de nuevo aquí. Seguramente me ausente una semana más. Pero lo necesito y más después de esta noche. Cené Cola Cao. Quizás eso me robó el sueño. Una noche entera de pesadillas como hacía tiempo que no me pasaba. 

Supongo que volver siempre es duro. Abandonar el mar que me ha susurrado cada noche para que durmiera tranquila. Abandonar el sol y los días de relax... Volver a casa, ya es difícil. 

Tener pesadillas con el motero, ni os cuento. Jamás he soñado con él cosas bonitas. Siempre son sueños malos, en los que me escribe cosas malas, en las que se va para no regresar, en las que me abandona y yo no sé el motivo. Quizás no sean sueños. Quizás es lo que me ha hecho sentir últimamente, solo que por la noche sale a relucir, una y otra vez en mi cabeza como si fuera una lavadora. Y así te levantas, con un mareo del quince corriendo al baño para vomitarlo todo. Eso es lo que me produce el motero por las noches... Náuseas mañana. ¿Qué estarás haciendo...? Ais... Se me ha metido un motero en el ojo y no sale, ni llorando... No sale. 

Y mi suerte crece por momentos. Volveré a mi sitio favorito, y allí me espera otro, con una amplia sonrisa... Fingiendo que no ha pasado nunca nada. Será la primera vez que le veré después de pasar todo lo que he pasado con él también... Supongo que le diré, "¿Bueno, qué?, ¿cómo te va?". 

No soy tan mala para que me dejen siempre por otra. No creo que sea el anticristo. No lo sé... Pero dos seguidos... Me han dejado en la mierda, ¿eh? Os lo prometo. 

Y Peter Pan, te deseo lo mejor en la vida, pero tú futuro, a pesar de que te quiero, no lo tengo yo, cariño. Yo no tengo el futuro de nadie. Y el mío me lo han robado, uno que no sabe el orden de los número ordinales... Qué no sabe lo que es primero y segundo... En fin, voy a desayunar cualquier cosa. Total. Mi estómago lo va a rechazar... 

Estoy tan cansada... No os lo imagináis. Estoy harta de ser yo quien lo pase mal... Estoy muy cansada. Y Alex, deja de hablar de aquella noche de domingo. Es una cosa muy muy muy privada, que sólo sabremos cinco personas. No saldrá de ahí. No te preocupes, esta noche en Leganés, no será igual. De hecho, no la pasaré en Leganés... No sufras por mí. Y no cojas el velero. Tenemos las playas cerradas por el temporal. No quiero más sustos. Disfruta del verano, peque. Nos vemos a la vuelta.

Patricia Izquierdo Díaz