viernes, 31 de julio de 2020

Sandra

Qué mal me caías, y siempre que lo recuerdo, me río. Con que cara me mirabas, la rancia número uno de todas. Y mírame, aquí escribiéndote a la una de la mañana porque quiero que todos los míos, tengáis un trocito de mí por escrito, es más o menos como firmar un contrato. Ponerle palabras a los hechos o a los sentimientos.

Como resumen te diré, que quiero una vida contigo, a tu lado y tú al mío, sin que me abandones, que me guíes como has hecho hasta ahora, estando Sandra, estando cuando lo he necesitado. Trabajando la amistad por ambas partes, porque lo que no se le ocurre a la una, se le ocurre a la otra, por dejarme entrar en tu vida, en tu familia y tus animales. Que tenemos muchos planes y con mucho esfuerzo, saldrán adelante, que el futuro es incierto, pero aquí estamos nosotras para escribirlo tan perfecto con sus tildes y sus comas, y si no nos sale, volvemos a empezar, porque somos de diez y sabemos que hacemos un buen equipo en todos los sentidos.

Sabes que para mí eres una super guerrera, que le pones una sonrisa y marcha a todos los problemas, que nunca te has quejado de nada y eso que no lo has tenido fácil. Que tú sabes que la vida te golpea a veces demasiado fuerte, pero que siempre sale el sol chipirón, y que nunca hay que dejar de contemplarlo. Eres una luchadora nata y un ejemplo a seguir para tanta gente, que soy muy afortunada de tenerte.

Y tras todo este rollo, me gustaría decirte que gracias.

Gracias por, simplemente, estar. Por hacerme sentir mejor cuando no puedo más. Por levantarme cuando me caigo, o por, directamente, darme tu mano antes de caer. Gracias por hacerme reír, por conseguir que llore de la risa y que tenga grabado no sé cuántos momentos donde he sido feliz contigo. Gracias por llegar y no irte. Por quedarte incluso después de conocerme realmente. Con todo lo que eso conlleva. Gracias por demostrar, que siempre fue mucho más que decir. Por marcar la diferencia y por recordarme qué es lo que merece la pena. Gracias por salvarme, al fin y al cabo. Por acompañarme en cada paso que doy, sin cambiar de camino.

Gracias, por todo y más. Te super quiero.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.