Tienes el poder de hacer que las cosas que crees más insignificantes se conviertan en algo imprescindible para otro. Para aquellos que creen en las cosas pequeñas. En los detalles tontos. En ese gesto que haces sin pensar y sin esperar nada a cambio. Solo porque te apetece. Hay algo dentro de ti que tú no conoces que es capaz de hacer feliz a los que te rodean. Con solo sonreír o enviar una carta. Una canción. Una rosa. Un abrazo en el momento adecuado. Un empujón justo a tiempo. Una llamada a tu madre. A tu abuela. Esas cosas que no piensas se convierten en magia para ellos. La razón para volver a creer y lanzarse otra vez. Para atreverse.
Hagámoslo más. Si tenemos el poder, aprovechémoslo para crear sonrisas. Para que no se rindan. Para que sueñen con lo inalcanzable.
Que al menos yo estaré ahí para hacer cosas (in)significantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.