sábado, 11 de abril de 2020

Princesa de la boca de fresa

No es el mejor día para escribirte a ti, princesa de la boca de fresa, guapo, simpático... Ha vuelto señores, el Nuevo Motero, el vecino de... Ya sabéis, no le voy a dar mucho bombo y platillo. 

Ayer cuando te vi la solicitud en Facebook, puesto que te tengo bloqueado en todas partes, me empecé a reír, y pensé ¿a quién no le viene bien un polvo en medio de la cuarentena? Y mi cabeza empezó a redactar una entrada llena de ironía y sarcasmo enterita para ti. Hoy, las cosas han cambiado. Mi familia se muere. ¿Sabes dónde te deja eso a ti? Te haces una idea, ¿verdad, moterillo? Pues eso. Déjame en paz.

Las cosas las hiciste, TÚ, como el culo, ¡apechuga con ello! Quisiste conseguir las cosas a la fuerza, y no sabes con quien diste. ¿Te crees que pierdo las bragas tan fácilmente? Con cuatro tonterías y una conversación subida de tono. ¿En serio? Creo que no me has conocido nada en absoluto estos meses. Y no me da ni pena. Eso es lo que me importas, majo. ¿Quieres un polvo? Pof está lleno de ellos. 

Encima eres tan retrasado de anular la petición de amistad sabiendo que se queda todo grabado. No eres más patético porque no te entrenas, mozo. Y sí, he visto tu mensaje. Gracias por llamarme enfadica. Deberías ir al club de la comedia, la verdad es que siempre me sacas unas risas. ¿Has oído hablar del respeto hacia la mujer? De cuando te dicen No, es NO. ¡Ah, ya me acuerdo! Que estabas harto del tema de las feministas y demás. Pues yo estoy harta de tíos como tú, que no tendéis una puñetera mierda. 

Y ahora, amore mio, que te den por culo.

Patri Izquierdo Díaz


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