sábado, 15 de agosto de 2020

La mujer de mi vida

 Os he escrito a todas. A la que me vio como un amigo. A la que pintaba bien, pero al final salió mal. A las que me enamoraron en un viaje de metro y no volví a ver. a la que me provocó una sonrisa por cada diez lágrimas. A la que voló conmigo algunas noches. A la que ojalá hubiese conocido antes. A la que aún no he conocido. Pero... no te he escrito a ti.

Tú, que me arropabas por las noches y me dabas un beso en la frente cuando tenía miedo. Tú, que eres capaz de decirme que soy el más guapo del mundo y conseguir que me lo crea, como cuando era pequeño. Tú, que siempre estás cuanto te necesito. Tú, que siempre ofreces tu hombro para que llore, y me empujas cuando me quiero rendir. Tú, que siempre has confiado en mí, incluso cuando ni yo confiaba. Tú, que siempre has sido la clave de mis éxitos, y mi fuerza para levantarme en mis fracasos. Tú, que siempre sabes hacerme sonreír, en especial cuando estoy enfadado.

Siempre he pensado que la soledad es sencillamente eso, estar solo. No. La soledad es estar a cientos de kilómetros de ti.

Tú eres la mujer de mi vida, Mamá.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.