sábado, 8 de agosto de 2020

Otro pollo sin cabeza más

Lo primero, darte las gracias por tu contestación y tu rapidez, no todo el mundo se toma la molestia de leer los mensajes que enviamos muchas locas, y te autorizo a publicar mi respuesta si quieres manteniendo mi anonimato.

Me alegra apreciar a través de tus palabras que WonderWoman también tiene miedo en ciertas situaciones y muestra la parte más humana. No dudo de tu fortaleza a la hora de enfrentarte a tus problemas, pero dejas asomar que tienes corazón y que hay temas que aun te atormentan y repercuten en tus actuaciones. Como una humana más...

Agradecerte cada uno de tus consejos, porque creo que todos en algún momento, como dices tú, hemos sido un pollo sin cabeza. Y no me sé la historia completa del motero, solo lo he ido leyendo a través de estos meses... Y me asombra con el cariño que le tratas con tus palabras, se nota que ha sido, y es, alguien importante para ti, es más, lo que más me asombra de todo, es que puedo ver amor... Amor escondido tras cada frase, un amor, cariño, que no se lo mereció y que a día de hoy, menos aún. Dudo que haya sido el amor de tu vida, porque una persona tan inhumana, tan falto de corazón pueda ser al amor de la vida de cualquiera, es totalmente imposible. Es uno más que juega a ser Dios con los sentimientos de las personas. 

Y nadie, concretamente tú, se merece a un ser así a tu lado. Lo mejor que te ha hecho es el haberse alejado aunque tú no lo veas. Aunque tú, de cierta manera, sigas estando algo cegada, lo que me vuelve a dar la razón en el tema del tamaño de tu corazón. Me llama la atención que buscarías la manera de ponerte en contacto con él si le pasara algo, si te llegases a enterar... Ojalá no lo hagas, porque lo único que te vas a llevar es un nuevo bofetón por su parte. Él no te quiere al lado, quizás porque no te sepa valorar o porque supo y sabía que eras demasiado para un personaje como él.

Gracias por compartir tu historia con tanta gente que te seguimos, que te leemos, que te escribimos y que nos llegas tan dentro. No dejes de hacerlo, cielo.

Anónimo



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